INVESTIGADORES
GUERESCHI Alina Beatriz
congresos y reuniones científicas
Título:
Estructuras en diques y vetas y su relación con las direcciones principales XYZ de la extensión regional cretácica en las Sierras de Córdoba
Autor/es:
MARTINO, ROBERTO DONATO; GUERESCHI, ALINA BEATRIZ
Lugar:
San Juan
Reunión:
Simposio; XV Reunión de Tectónica; 2012
Institución organizadora:
Asociación Geológica Argentina
Resumen:
En las Sierras de Córdoba, se identifican tres tipos de estructuras planares asociados a la extensión cretácica: diques clásticos, diques basálticos y vetas de fluorita. Ambos tipos de diques afloran a lo largo del cuerpo de la Sierra Chica, mientras que las vetas de fluorita lo hacen en la Sierra Grande-Sierra de Comechingones, en las cercanías de los dos batolitos devónicos (Achala y Cerro Aspero), principalmente en sus márgenes orientales. En la cuenca de Copacabana (Martino et al. 2012), al norte de la Sierra Chica, se identifican esencialmente dos juegos de diques clásticos a casi 90º entre sí, orientados N 280º y N 30º respectivamente, con buzamientos cercanos a la vertical (80-90º). Estos diques clásticos cortan a la foliación S2 de los granitoides, orientada N 60º/55º, la que bisecta por el ángulo obtuso a los diques nombrados. Se reconocen fallas inversas menores, orientadas N 50°/35° NO, que desplazan a los diques clásticos y se asignan a una deformación posterior, probablemente terciaria. Las dos direcciones de deformación finita deducidas aquí serían: N 330º = extensión (eje deformación finita X) y N 60º = contracción (eje de deformación finita Z); el eje Y se halla perpendicular a XZ y es cercano a la vertical. En las cercanías del dique Los Molinos, en la parte central de la Sierra Chica, Gordillo y Lencinas (1969) cartografiaron un sistema de 35 diques traquibasálticos, de espesores que no sobrepasan los 2,5 metros, orientados N 300-310°/50-90° E, discordantes con el basamento ígneo-metamórfico, compuesto aquí por gneises biotíticos granatíferos, intrusivos ácidos, mármoles cálcicos y anfibolitas. El plano de foliación S2 dominante de las metamorfitas está orientado N 320-340° al norte del río Los Molinos y N 0° al sur de éste, buzando 50-85°E. Las dos direcciones de deformación finita deducidas aquí serían: N 4º = extensión (eje de deformación finita X) y N 94º = contracción (eje de deformación finita Z); el eje Y se hallaría perpendicular a XZ y es cercano a la vertical. La región del margen oriental de la Sierra de Comechingones, allí donde se ponen en contacto el granito del plutón de Cerro Aspero y el encajonante metamórfico, se halla una mineralización de fluorita en vetas, principalmente desarrollada en el granito, con algunas manifestaciones menores dentro del encajonante metamórfico (Grupo Cerros Negros). Esta relación indica claramente que las vetas de fluorita son posmetamórficas y posdevónicas: 117-131 Ma (Galindo et al. 1996). Estas vetas, mineralógicamente compuestas por fluorita + cuarzo, son de baja temperatura, formadas en un ambiente hidrotermal (epitermal) según Coniglio et al. (2006). La orientación de las vetas sigue dos direcciones dominantes: N 70º y N 120º. Los buzamientos asociados a estas dos direcciones son 75º y 77º hacia el sur respectivamente. Las dos direcciones de deformación finita deducidas aquí serían: N 8º = extensión (eje deformación finita X) y N 98º = contracción (eje de deformación finita Z); el eje Y se halla perpendicular a XZ y es cercano a la vertical, inclinado cerca de 15° al norte con respecto a la vertical. Las tres direcciones de deformación finita medias, deducidas con los diques clásticos, los diques de traquibasaltos y las vetas de fluorita, serían: N 330-8º = extensión (eje deformación finita X) y N 60-98º = contracción (eje de deformación finita Z); con el eje Y perpendicular a XZ y cercano a la vertical. Cierta rotación regional horaria, en sentido N-S, de las direcciones XZ se debería a heterogeneidades en el basamento y a la influencia de la contracción generalizada durante el Terciario que levantó las sierras. Es notable que la extensión habría sido, en general, perpendicular a la foliación regional S2, cortando nítidamente la fracturación extensional en forma oblicua, con alto ángulo al plano mencionado. Un posible origen de esta fracturación penetrativa, donde se habrían emplazado diques clásticos, diques de traquibasaltos y vetas de fluorita, serían los esfuerzos inducidos en la placa Sudamericana por la apertura del océano Atlántico. Estos esfuerzos inducidos se habrían traducido como empujes en el área Pampeana, dirigidos este-oeste.