DESARROLLO DE UN PIOJICIDA NATURAL EN BASE A

PICOLLO, MARÍA INÉS

Buenos Aires

Congreso; Jornadas MERCOFITO III; 2007

El piojo de la cabeza, Pediculus humanus capitis (De Geer) es un ectoparásito específico que afecta principalmente a niños de edad escolar, tanto en países desarrollados como en desarrollo. El control químico de esta plaga comenzó en el año 1943 con el DDT y ha continuado a nivel mundial con insecticidas clorados (lindane), organofosforados (malatión), carbamatos (carbaryl), piretrinas y piretroides (deltametrina, permetrina, d-fenotrina). Los piretroides (especialmente permetrina) han sido la principal herramienta para el control químico del piojo de la cabeza durante las últimas décadas. El uso intensivo y continuado de estos insecticidas produjo desarrollo de resistencia a insecticidas piretroides en las poblaciones de piojos bajo control. En Argentina, nuestros estudios de laboratorio determinaron altos niveles de resistencia a permetrina (desde 154,4 hasta 655,2) en la mayoría (92,3%) de las muestras de piojos recolectados en 26 escuelas de la ciudad de Buenos Aires y alrededores (Picollo et al. 1998, 2000; Vassena et al. 2003). Estos estudios demostraron además que los piojos resistentes a permetrina, desarrollaron alta resistencia a otros insecticidas piretroides (deltametrina, d-fenotrina, cipermetrina), situación que inhabilita el uso de estos compuestos para el control de piojos. Este fenómeno es preocupante, debido a la relativa baja disponibilidad de compuestos alternativos suficientemente efectivos sobre piojos y con la suficiente baja toxicidad en mamíferos, como para poder ser utilizados como pediculicidas. El uso de los insecticidas piretroides debe ser discontinuado en las poblaciones resistentes para interrumpir el desarrollo de altos niveles de resistencia, que llevan a la falta de efectividad del tratamiento y el aumento de dosis o frecuencia de uso de los productos pediculicidas, aumentando así el riesgo tóxico en los niños expuestos. Una alternativa a los insecticidas convencionales son los compuestos botánicos como los aceites esenciales (AE) de plantas aromáticas, los cuales han despertado alto interés por su actividad repelente, ovicida y adulticida, en varios insectos plaga (Isman 1999), incluyendo piojos humanos (Burgess 2004) y por su relativamente bajo efecto tóxico (Zygadlo y Juliani, 2000; Zunino et al., 2003). Los AE son destilados del material vegetal por arrastre con vapor de agua y generalmente son los responsables del olor característico de la planta aromática. Están formados por número variable de componentes primarios y secundarios (monoterpenos y sesquiterpenos), presentando una diversidad química muy amplia (Zygadlo y Juliani, 2003). De acuerdo a los antecedentes expuestos, el CIPEIN estudió la actividad biológica de aceites esenciales de plantas autóctonas sobre P. humanus capitis resistentes a insecticidas, con el propósito de utilizarlos como ingredientes activos de nuevos formulados pediculicidas. Se utilizaron aceites esenciales de plantas aromáticas provenientes de diferentes zonas de Argentina, con especial atención de Córdoba, Salta, Jujuy y La Rioja, para evaluar el poder de volteo y el efecto repelente de los aceites seleccionados sobre poblaciones de piojos resistentes a insecticidas piretroides. La recolección, separación e identificación de los aceites y sus componentes mayoritarios fue realizada por el grupo del Dr. Julio Zygadlo, de la Cátedra de Química Orgánica y Productos Naturales, de la Universidad Nacional de Córdoba (IMBIV-CONICET). La recolección de piojos, la selección de insectos adultos y los ensayos biológcos se reaizaron en el CIPEIN de acuerdo a las metodologías desarrolladas para tal fin Los estudios realizados en el laboratorio, demostraron que los AE extraídos de 11 plantas aromáticas recolectadas en nuestro país (de las 16 evaluadas) poseían alto poder de volteo de ciertos componentes individuales de los aceites más efectivos (Toloza et al. 2006). Se encontró alta actividad piojicida de vapores de aceites pertenecientes a Eucaliptos cinerea, Eucaliptos viminalis y Eucaliptos saligna con valores de TV50  (tiempo necesario para voltear el 50% de los insectos expuestos) de 12- 14,9 y 17,4 minutos respectivamente (foto 2). En base a estas evaluaciones se determinaron los componentes mayoritarios comunes para aquellos aceites con alta actividad insecticida, con el propósito de evaluarlos en forma aislada y utilizarlos en las investigaciones sobre el modo de acción y metabolismo de los productos naturales en los piojos. La evaluación de los componentes mostró alta actividad insecticida de los compuestos cineol y anisol (TV50: 11,1 y 12,7 minutos). La alta efectividad piojicida de algunos AE y/o sus componentes demostraron que pueden representar una estrategia alternativa para el desarrollo de formulaciones pediculicidas con ingredientes activos innovadores. Considerando que estos compuestos puros aplicados a la cabeza humana podrían tener alta tasa de evaporación, los aceites (o sus componentes) debían ser incorporados en formulados capilares que permitan una liberación lenta y adecuada del compuesto. Para ello se utilizaron siliconas de distintas propiedades físico-químicas, que además de ser buenos disolventes de los aceites esenciales (o de sus componentes), tienen excelentes propiedades cosméticas y capacidad de potenciar el efecto pediculicida, reduciendo de esta manera el contenido en activos, el costo y el riesgo toxicológico. Finalmente y de acuerdo a los requerimientos comerciales, se incorporaron colorantes y/o perfumes, se realizaron estudios de toxicidad en mamíferos (oral y dérmica en ratas, irritación ocular y dérmica en conejos), y estudios clínicos en humanos, antes de su comercialización. Los resultados de estos estudios llevaron al desarrollo de una formulación pediculicida que contiene como ingrediente activo los aceites esenciales de eucaliptos, enriquecido en algunos de sus componentes más activos, y disueltos en una base de productos siliconados. Estos formulados mostraron óptimos resultados en piojos susceptibles y resistentes, y originaron una patente de invención, una transferencia de tecnología y tres nuevos productos pediculicidas comercializados en nuestro país desde el año 2004 por Laboratorios ELEA con las marcas NOPUCID BIO.