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Los cráteres generados por colisiones en los cuerpos del Sistema Solar constituyen una marca distintiva en las superficies de dichos objetos que nos permite remontarnos hacia el pasado para descubrir la historia y evolución misma de cada mundo. Las misiones recientes a los objetos del Sistema Solar nos han permitido observar estas estructuras en detalle y plantear el estudio de nuevos procesos físicos, dinámicos, químicos e incluso biológicos. El sistema de satélites de Saturno es muy diverso, desde su luna más grande, Titan, la segunda luna más grande del Sistema Solar, los satélites medianos con el ya emblemático Encelado con sus criovolcanes activos en su polo Sur eyectando hielo al espacio y alimentando al anillo E, los irregulares, hasta los más pequeños con sus formas y características peculiares. En este trabajo estudiamos los satélites pequeños: Pan, Atlas, Daphnis, Prometheus, Pandora, Epimetheus, Janus, Aegaeon, Methone, Anthe, Pallene, Telesto Calypso Polydeuces, Helene e Hyperion y mediante un modelo teórico calculamos los impactos de objetos Centauros y la consecuente producción de cráteres de impacto en los mismos. Comparamos nuestros resultados teóricos con las observaciones lo cual nos permitió estudiar las consecuencias de la producción de cráteres sobre las superficies de estos satélites en cuanto a los procesos físicos que se dan en los mismos. Además este estudio nos permitió poner restricciones a la formación y origen de dichos satélites.Nuestros resultados sugieren que los satélites más grandes de este grupode ?los pequeños? podrían ser ?primordiales?, aunque muy craterizados y con presencia de cráteres grandes, pero los más pequeños no habrían sobrevivido a las colisiones de los Centauros en el Sistema Solar actual. Es decir que durante la edad del Sistema Solar podrían haber habido satélites muy pequeños en torno a Saturno, tal vez en las órbitas actuales pero se habrían fragmentado catastróficamente quedando un núcleo primordial a partir del cual el satélite se habría re-acretado. Esto está de acuerdo con teorías de formación de satélites de Saturno (e.g Crida & Charnoz, 2012. Science, 338, 1196) y con las observaciones hechas por Cassini en las que se observan indicios de procesos de acreción dematerial del anillo A sobre los satélites Pan, Atlas y Daphnis (Charnoz et al. 2007. Science, 318, 1622). Estos satélites presentan una forma elongada con un ?cinturón? de material en el ecuador recientemente acretado del anillo (Porco et al. 2007, Science, 318, 1602).