Comportamiento de indicadores químicos y biológicos de calidad de suelos bajo labranza reducida y siembra directa continua en la región semiárida sur

SCHMIDT, E., N. AMIOTTI Y O. BRAVO

San Luis

Congreso; XXI Congreso Argentino de la Ciencia del Suelo; 2008

Asociación Argentina de la Ciencia del Suelo

La siembra directa (SD) está ampliamente difundida en el país, principalmente en la Región Pampeana húmeda. En el SO bonaerense, donde los ecosistemas son más frágiles y de baja resiliencia, el impacto de esta tecnología sobre la calidad del recurso suelo no está claramente determinado. En estos ambientes, los factores edafoclimáticos y la incidencia de plagas y patógenos en lotes bajo SD continua, limitan la productividad. La cantidad de residuos de cosecha es reducida lo que permite inferir que el aporte de esta tecnología al secuestro de CO es limitado. Por otra parte, la no inversión del suelo afectaría la dinámica de nutrientes y la actividad de los microorganismos edáficos, generando estratificaciones. El objetivo de este trabajo fue contribuir a dilucidar el efecto de la aplicación de SD continua de 15 años sobre parámetros de calidad de suelos, en profundidades diferenciales del epipedón, contrastando los resultados con los provenientes de lotes bajo labranza reducida (LR). Se realizaron muestreos a tres profundidades: 0-5 cm, 5-10 cm y 10-18 cm en lotes en producción de establecimientos agrícolas, ubicados en la zona de Bahía Blanca. Las determinaciones incluyeron densidad aparente (Dap), carbono orgánico (CO), nitrógeno total (Nt), pH, fósforo disponible (Pd), CO (COP) y Nt (NP) en la fracción particulada del suelo (mayor a 100 µ) y actividad biológica (AB). Bajo SD se observó un incremento de la Dap en todas las profundidades evaluadas. La compresión por el tránsito genera compactación del topsoil en este sistema, principalmente en la profundidad 5-10 cm. Los contenidos de CO (%), Nt, fracción mayor a 100 u, NP y relación NP/Nt fueron menores en SD que en LR. La aplicación de la SD no contribuyó a incrementar el contenido de CO en el suelo, mientras que la LR redundó en un aumento medio del 16 % del CO en los 0-18 cm. No se encontraron diferencias significativas en el pH, ni en los contenidos de Pd, situación atribuida a las similares dosis de fertilizantes utilizadas en ambos sistemas de labranza. La AB mostró un comportamiento diferencial con valores muy elevados en el espesor 0-5 cm en SD. En las capas subyacentes las relaciones se invierten registrándose valores más altos bajo LR. Los indicadores de calidad evaluados muestran que, tal como se la ha operado, la SD continua no contribuyó al mejoramiento de la calidad de los suelos ni al secuestro de CO2 en el mediano plazo. Es necesario generar mayor información, profundizando en las investigaciones sobre la temática, si se persigue optimizar el funcionamiento de esta herramienta tecnológica en zonas marginales para la agricultura.