HIDROQUÍMICA DEL ACUIFERO TERMAL PROFUNDO DE BAHÍA BLANCA

MARTÍN ESPÓSITO,; DARÍO PAOLONI, JUAN; SEQUEIRA, MARIO EDUARDO; CLAUDIO FERRARRELLO,; RODRIGUEZ, L.

Resistencia, Chaco, Argentina.

Congreso; XXIII Congreso Nacional del Agua ? CONAGUA 2011; 2011

Comite Permanente - CONAGUA 2011

La ciudad de Bahía Blanca y su entorno periférico acaba de superar recientemente una importante crisis en el abastecimiento de agua para consumo, debido a que en los últimos cuatro años el régimen de precipitaciones ha sido sumamente pobre. Esta situación afectó a su principal fuente de aprovisionamiento, el embalse Paso de las Piedras, debiendo la comunidad recurrir a otras fuentes, entre otras, el uso de las aguas de acuífero termal profundo. Este trabajo tiene como finalidad la evaluación de diferentes parámetros físico-químicos, con el objetivo de obtener un diagnóstico actualizado de la calidad de las aguas del acuífero termal profundo de Bahía Blanca, el tenor de sus concentraciones y el tratamiento estadístico de los resultados. Se tomaron muestras de 20 perforaciones con profundidades que superan generalmente los 700 metros,  buena surgencia natural y temperaturas que varían entre 55,5ºC y 61,5ºC, ubicadas dentro del radio urbano y suburbano de la ciudad de Bahía Blanca, además se analizaron y evaluaron 57 parámetros, compuestos y elementos químicos. La presencia en algunas de las perforaciones de concentraciones de boro y vanadio podrían estar afectando la calidad de agua para consumo humano, según la OMS y la U.S.EPA; asimismo, se observaron valores relativamente altos de cloruros y sodio, determinando el carácter de clorurada sódica para el agua  de unos pocos surgentes. El análisis estadístico ha detectado que los pozos que están localizados en el Oeste y Noroeste de la ciudad tienen una mayor concentración de sales en la composición química de sus aguas. Para los elementos legislados como aluminio, antimonio, arsénico, bario, berilio, cadmio, cobre, cromo, flúor, hierro, manganeso, molibdeno, níquel, plomo, selenio y zinc se encontraron, en general, niveles muy por debajo de los límites máximos admitidos por la OMS, a pesar de la presencia de arsénico y flúor, bastante común en la zona, en los acuíferos más superficiales con valores de concentraciones notablemente altos. La determinación de los restantes elementos químicos, para los cuales no existen niveles guía, representa hasta el momento un estudio inédito.