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El estudio de la artropodofauna edáfica es una herramienta útil para la evaluación de la sustentabilidad de los suelos cultivados, porque refleja el estado del funcionamiento del suelo. En una primera etapa de este estudio se construyó un modelo estructural y funcional de un cultivo de tomate convencional que incluyó a oribátidos, colémbolos, arañas y coleópteros. En esta segunda etapa, el objetivo fue estudiar estas taxocenosis edáficas, epigeas e hipogeas, durante el mismo ciclo agrícola, en cultivos de tomate orgánico y evaluar si el modelo de interrelaciones obtenido refleja diferencias respecto al convencional y si éstas pueden interpretarse como posibles beneficios de la aplicación de prácticas consideradas más saludables. El estudio se llevó a cabo en parcelas pertenecientes al (CHP). La fauna se recolectó durante un ciclo de cultivo completo mediante muestras de suelo, de 300 cm3 para la mesofauna y con trampas de caída para la macrofauna. Las mayores diferencias entre los distintos tipos de manejo se encontraron en la macrofauna: bajo manejo orgánico los coleópteros fueron más abundantes y diversos incluyendo casi todas las especies presentes en convencional con un 32% de similitud taxonómica. Las arañas fueron igualmente diversas y ricas en especies pero sólo presentaron un 12% de especies comunes. La mesofauna (Collembola y Oribatida) presentó un registro pobre, posiblemente en relación al efecto disruptivo de las prácticas de labranza del suelo en ambos tipos de manejo. La mayor frecuencia temporal de estas especies en el cultivo orgánico sugiere mayor estabilidad en los cultivos orgánicos. Los modelos funcionales basados en la composición y abundancia de las especies del cultivo orgánico reflejan la existencia de una comunidad epigea más diversa conectada con el suelo más que con el cultivo. La comunidad hipógea es similar bajo ambas prácticas y sólo presentan diferentes especies dominantes.