El desarrollo de la psicología en Argentina (1950-2010)

GALLEGOS, MIGUEL; BERRA, MARTINA PAULA; CASTELLARÍN, MARÍA MARCELA

México

Congreso; XXIII CONGRESO MEXICANO DE PSICOLOGÍA; 2016

Sociedad Mexicana de Psicología

Esta comunicación tiene como objetivo destacar el tiempo transcurrido de la profesión del psicólogo en Argentina, desde la fundación de las carreras de psicología en la década de 1950 hasta el reciente proceso de evaluación y acreditación de carreras universitarias en todo el país. Por medio de una exhaustiva revisión de diversas fuentes documentales de primera y segunda mano, se realizó una periodización de la psicología en Argentina, consignando diversos aspectos significativos cada 10 años. La revisión documental comprendió publicaciones periódicas, libros, revistas, documentos institucionales y actas de congresos. El corpus documental se ha obtenido por medio de la búsqueda en bases de datos y se ha delimitado en función de la referencia historiográfica relacionada con la psicología en Argentina. Metodológicamente se emplearon técnicas bibliométricas y de análisis de contenido con el fin de analizar el corpus documental y poder establecer una periodización de la psicología en Argentina en el período profesional. En total, se consultaron más de 20 obrasrelacionadas con la psicología en Argentina y más de 80 artículos. Asimismo, se revisaron diversas actas institucionales y congresos temáticos. Cabe señalar, que esta comunicación es parte de una investigación de mucho mayor alcance, por tanto, sería imposible enumerar todas fuentes documentales trabajadas.Si bien la psicología en Argentina ya tenía una importante difusión desde comienzos del siglo XX, con la fundación de laboratorios de psicología, la creación de cátedras universitarias, la edición de diversas publicaciones psicológicas y la organización de institutos de psicología aplicada, recién con la creación de las carreras de psicología a partir de la década de 1950 se instituye la etapa de la profesionalización de la psicología en Argentina.Durante la década de 1950 se crean varias carreras de psicología en las ciudades más importante del país: Rosario en 1954, Buenos Aires en 1957, Córdoba, La Plata y San Luis en 1958, entre otras. Resulta interesante destacar que el primer proyecto de carrera de psicología en Rosario se encuentra circunstanciado por el auspicio del gobierno peronista, el cual es depuesto al año siguiente en setiembre de 1955, lo que implica para esa primera carrera su interrupción y recomienzo en 1956, con nuevos actores institucionales y un nuevo plan deformación académica. La década de 1960 representa el tiempo en el que se titulan los primeros psicólogos, quienes además de abonar a la definición y construcción de la identidad profesional del psicólogo argentino, generan las primeras instancias de agremiación profesional. Como ejemplo, se organiza la Asociación de Psicólogos de Buenos Aires (APBA) y la Asociación de Psicólogos Profesionales Universitarios de Rosario (APPUR), ambas en 1962. Durante esta década también se registra la incorporación de la orientación psicoanalítica en la formación universitaria del psicólogo, lo cual será una marca muy significativa de lapsicología en el país.En la década de 1970 se evidencia una profundización de los conflictosinterprofesionales entre la psicología y la medicina, que ya estaban presentes desde la década anterior y cuyos efectos depararían diversas limitaciones en el quehacer profesional del psicólogo. Asimismo se trata de una década donde se constata una mayor agremiación profesional de los psicólogos y una marcada colectivización de la lucha por el reconocimiento legal y autónomo de la psicología, que hasta ese tiempo no era reconocida oficialmente por el Estado. Para el caso, vale destacar la formación de la Confederación de Psicólogos de laRepública Argentina (COPRA), en 1971, luego devenida en la Federación de Psicólogos de la República Argentina (FEPRA), en 1977. En el contexto sociopolítico se trata de una década que sufre una nueva fractura democrática y atestigua la implantación de la dictadura más cruenta que registra el país a partir de 1976.La década de 1980 se inaugura con el retorno a la democracia en 1983, donde además se consigna el período de normalización universitaria, en el que se obtienen varios logros profesionales y académicos para la psicología. A nivel nacional se alcanza el reconocimiento legal de la profesión y la sanción de las incumbencias profesionales en 1985. También durante este tiempo se produce la autonomización académica de varias carreras de psicología, lo que significó que algunas se transformen en facultades autónomas, y ya no sean escuelas dependientes de otras facultades.Durante la década de 1990 se hace visible una fuerte preocupación por el mercadosociolaboral del psicólogo, producto de la creciente cantidad de profesionales y los exiguos espacios institucionales habilitados para su inserción. Si bien durante tales años el número de profesionales fue creciendo exponencialmente, su totalidad no recubría todas las demandas potenciales de la población. Por otra parte, aunque comienza a visualizarse una tenue diversificación de la profesión, se observa una concentración de profesionales en áreas clásicas como la clínica y la educación. A estos aspectos profesionales se agregan los cambiossociopolíticos instaurados por el Mercosur y las diversas transformaciones en el contexto de la educación superior, cuyas consecuencias promovieron la internacionalización y regionalización de la educación superior en psicología. En este marco, la formación en psicología comienza a visualizarse como una problemática a nivel nacional y como efecto se crea la Asociación de Unidades Académicas de Psicología (AUAPSI), en 1991.En la primera década del siglo XXI se constata una mayor diversificación de laprofesión del psicólogo, a partir de la emergencia de nuevas áreas de trabajo. Se trata de un tiempo en el que las carreras de psicología son declaradas de interés público y se consensúan diversos criterios de formación académica y profesional. En este marco acontece una importante discusión respecto de la formación en psicología, atravesada por el actual proceso de evaluación y acreditación de carreras universitarias de psicología. Por lo demás, es untiempo en el que se intensifican las actividades de investigación y producción de conocimientos en psicología, por medio del aumento de grupos y equipos de trabajos, financiación de proyectos, conformación de redes académicas, mayor cantidad de eventos y revistas científicas, y mayor número de becarios y doctores en psicología, entre otros aspectos.En su conjunto, la psicología en Argentina se encuentra fuertemente institucionalizada a través de sociedades científicas, colegios profesionales, una federación gremial nacional, varias facultades de psicología, tanto en el ámbito público como en el terreno privado, una gran masa de profesionales en actividad y una ingente cantidad de estudiantes en todo el país. Si se juzga positivamente su devenir histórico, es posible indicar que la psicología en Argentina seguirá teniendo un rol clave en la sociedad del siglo XXI, ya sea como disciplina, ciencia y profesión. No obstante, es probable que se enfrente con ciertos desafíos ineludibles, tales como una mayor incidencia en los problemas de orden público, la apertura de nuevos campos de aplicación y la ampliación de las fuentes laborales, la obtención de mayores recursos económicos destinados a la investigación psicológica y una formación académica más heterogénea y acorde a los requerimientos sociales.