Avalanchas 3. SCYMVI. Primera Etapa. Tercer Trimestre

LEIVA, J.C., H.H. MARTÍNEZ Y A. CASTELLER

2007-07-01

2007-12-31

Asesoría Técnica

Transportes-Terrestres

Este trabajo refleja los resultados obtenidos durante el tercer trimestre del proyecto, referidos en los Términos de Referencia del Contrato (Anexo I bis) como resultado: 3.A.a Modelización de los CAP (Cauces prioritario de avalanchas). Existen numerosos antecedentes de escurrimientos de avalanchas en la zona comprendida entre Polvaredas y el Túnel Internacional, la mayoría producidas durante tormentas, o inmediatamente a continuación de intensas nevadas, que generaron acumulaciones críticas de nieve. La determinación de la zona de inicio de las avalanchas es muy importante para la realización del control y manejo del riesgo. Mientras que la distancia de frenado y la altura de depósito de las avalanchas son fácilmente medibles, la zona de inicio es generalmente difícil de delimitar por la inaccesibilidad del terreno o las malas condiciones del tiempo en las partes altas de los cauces de avalanchas. La definición de la potencial zona de inicio (PZI) es clave para estimar el riesgo de avalancha en un sitio dado ya que, junto con la altura de nieve en la zona de inicio, determina el volumen inicial de una avalancha. El volumen inicial es un parámetro importante para la evolución de una avalancha en su descenso hacia el fondo del valle. Un gran volumen inicial permite el desarrollo de una avalancha de grandes dimensiones, con una gran distancia recorrida desde la zona de inicio a la de frenado, aun cuando las condiciones a lo largo del sendero no sean favorables para la incorporación de nieve. Un volumen inicial de nieve pequeño produce, generalmente, distancias de recorrido menores, a menos que las condiciones a lo largo del sendero sean muy favorables para la incorporación de nieve adicional. Las características topográficas del área de inicio de una avalancha son muy importantes en la determinación de la frecuencia de la avalancha, cuyo conocimiento es determinante para el procedimiento de mapeo del riesgo de avalancha. En Suiza, por ejemplo, los mapas de riesgo se generaron a partir de la combinación del análisis de eventos históricos y de simulaciones numéricas de avalanchas1,2. Los eventos de avalanchas históricas dan una idea del tamaño y tipo de avalancha que puede ocurrir en el futuro. Sin embargo, generalmente no hay suficiente información disponible sobre un sitio como para derivar una estadística válida de la frecuencia de avalanchas de determinado tamaño. Se trata entonces de relacionar la ocurrencia de avalanchas a parámetros geomorfológicos, para poder trasladar la estadística existente en sitios con extensos y precisos registros, a otros sitios con menor información, usando solamente la caracterización geomorfológica3. En este trabajo correremos algunos modelos numéricos para arribar a la relación que existe entre las condiciones iniciales y el efecto de las avalanchas en los CAP que hemos seleccionado en el Segundo Informe. Además, en respuesta al Informe Deiana del 10 de abril, aclararemos algunos aspectos relacionados con el resto de los cauces de avalanchas (los no prioritarios en la Primera Etapa) y la entrega del material nivométrico.