INVESTIGADORES
JOFRE Ivana Carina
congresos y reuniones científicas
Título:
PROCESOS DE PATRIMONIALIZACIÓN CULTURAL COMO FORMAS IMPERCEPTIBLES DEL DESPOJO EN ARGENTINA
Autor/es:
IVANA CARINA JOFRÉ
Lugar:
Ciudad Autonoma de Buenos Aires
Reunión:
Simposio; Simposio Internacional sobre Politicas Patrimoniales en el contexto actual latinoamericano; 2017
Institución organizadora:
Fundación Tiempos y RIDAP
Resumen:
Resumen ExtensoDesde comienzos del siglo XXI hemos empezado a ver a nivel local y regional cambios drásticos en las formas de re-organización de la política patrimonial de los Estados en Latinoamérica, una profundización del multiculturalismo neoliberal como principio organizador de los discursos y practicas patrimoniales, turísticas, planes de ordenamiento territorial, cada vez más intervenidos por la agenda del patrimonio mundial y supuestamente orientados a la integración regional de los países de la región. Esta reorganización del ?patrimonio de la humanidad? se corresponde con las nuevas orientaciones políticas de la economía financiera global y son dictadas por un modelo de profundización del desarrollo neoextractivista exportador aceptado por los Estados latinoamericanos que, como Argentina, asumieron compromisos ya desde los años 90, con el Consenso de los Commodities, basado en la exportación de bienes primarios a gran escala, entre ellos hidrocarburos (gas y petróleo), metales y minerales, productos agrarios, y biocombustibles. Como lo señalan algunos autoras y autores, desde el punto de vista social, el Consenso de los Commodities, que fundamenta al neoxtractivismo desarrollista, conlleva la profundización de la dinámica de desposesión (Harvey (2003, 2004), que no es otra cosa que un modelo de despojo y concentración de tierras, recursos y territorios que tiene a las grandes corporaciones (en una alianza multiescalar con los diferentes gobiernos) como actores principales (Svampa y Viale, 2014: 15). Retomando ideas de Rosa Luxemburgo, David Harvey hace una distinción entre la reproducción ampliada y la acumulación por desposesión y sostiene que esta última se ha convertido en la forma dominante de acumulación capitalista de la actualidad, lo cual, a nivel económico y social, significa la posibilidad de liberar activos de bajo coste [a través de la privatización] abriendo vastas áreas para la absorción de capitales excedentes, mientras que también proporciona los medios para descargar el coste de la devaluación de los capitales excedentes sobre los territorios y las poblaciones más débiles y vulnerables (Harvey, 2004: 142). No hay que perder de vista que las alianzas multiescalares caracterizan este nueva fase de acumulación, a partir de lo cual, el capital financiero y las instituciones de crédito respaldadas por los poderes del Estado constituyen el cordón umbilical que une la reproducción ampliada con la acumulación por desposesión (Hart, 2006). Esto es lo que podemos observar también en los arreglos financieros globales del patrimonio mundial en la actualidad, cuya máxima expresión son hoy los ambiciosos proyectos de patrimonialización desarrollados en Sudamérica como es el Sistema Vial Andino Qhapac Ñam declarado en 2014 patrimonio mundial por UNESCO, y otros proyectos menos ambiciosos pero de iguales características transnacionales, extractivistas, y por lo tanto neocoloniales y patriarcales, como el Rally Dakar Sudamericano.Como lo señala Gilian Hart, la acumulación por desposesión, como un proceso continuo, tiene el potencial para iluminar las conexiones, y en este sentido, como lo observó Harvey las luchas contemporáneas representan reacciones a la acumulación por desposesión. Por tratarse de un proceso continuo, el despojo también necesita ser retratado en sus especificidades históricas y geográficas, y es desde esas especificidades y conexiones que se puede producir un trabajo político y analítico dice Hart (2006). De la misma manera, dice la autora, la acumulación por desposesión nos permite poner de relieve las depredaciones forjadas por las formas neoliberales del capital en la actualidad, pero no es lo suficientemente útil si no se acompaña de la comprensión de las historias, las memorias y los significados específicos del despojo; esto es, su capacidad para reconfigurar el espacio habitado de forma gradual e imperceptible (Ojeda, 2016). En este sentido apuntado, es sabida la relación existente en las tramas capitalistas que configuran el patrimonio como concepto y como política de Estado en la actualidad, pero pocas veces nos detenemos a desentrañar las formas particulares que se traman en las nuevas configuraciones estatales y empresariales que se presentan en nuestros países Latinoamericanos en las últimas décadas como parte de estas nuevas formas de despojo ligadas al modelo neoextractivista, y mucho menos frecuente son los estudios sobre las formas sostenidas, ordinarias y legitimadas del despojo, puesto que se asume usualmente que el despojo solamente tiene la forma de desalojos violentos (Ojeda, 2016). Desde esta óptica, importa la dimensión narrativa y moral del despojo desde la mirada de las propias comunidades afectadas, quienes ponen en evidencia que la continuidad con el pasado es lo que permite hablar del despojo (Garzón, 2016). A partir de estas ideas antes mencionadas quiero referirme a los procesos de patrimonialización como formas ordinarias, legitimadas e imperceptibles de violencia encargadas de reconfigurar el espacio y las relaciones sociales intra e intercomunitarias en los territorios interiores de la Argentina, como sucede en la provincia de San Juan, sindicada en los últimas décadas como capital de la megamineria argentina. Para ello me centraré en los procesos de patrimonialización implicados en la selección, declaración y puesta en valor del Sistema Vial Andino Qhapac Ñam en la citada provincia; expresión reciente de estos nuevos proyectos a gran escala del patrimonio mundial y que además se liga a los proyectos de envergadura territorial y económica de la cartera del IIRSA, tal como es el Proyecto Transnacional del Corredor Bioceánico que conectará el centro de Argentina, con el puerto del Océano Pacífico de la ciudad de Coquimbo y el puerto de la ciudad de Porto Alegre en el Océano Atlántico. Primero quiero concentrarme en describir los procesos de patrimonialización ligados a estos nuevos planes de ordenamiento territorial funcionales al neoextractivismo desarrollista en la región, sus antecedentes y formas particulares que adquiere en la provincia de San Juan, para luego mostrar la dimensión narrativa local de estos despojos imperceptibles que se ligan a una larga historia de despojos perfectamente identificados y narrados por las comunidades. Desde esa perspectiva señalo también la existencia de procesos de contrapatrimonialización y despatrimonialización de cuerpos, lugares y territorios de la memoria indígena que, desde ontologías políticas pluriversales, desafían estas nuevas formas del despojo, ordenadamente tramadas y desplegadas en la política transnacional al servicio del orden financiero global.