INVESTIGADORES
LO PRESTI Maria Silvina
congresos y reuniones científicas
Título:
El tratamiento con Benznidazol o Tioridazina en la fase cronica mejora la sobrevida y la cardiopatia chagasica II
Autor/es:
BUSTAMANTE, JM; RIVAROLA, HW; LO PRESTI, MS; FERNANDEZ, AR; ENDERS, J; PAGLINI, PA
Lugar:
Mendoza
Reunión:
Congreso; VII Congreso Argentino de Protozoologia y Enfermedades Parasitarias.; 2005
Institución organizadora:
Sociedad Argentina de Protozoologia
Resumen:
Dos de las hipótesis que intentan explicar la  fisiopatogenia de la miocardiopatía chagásica son la de autoinmunidad y la de la persistencia del parásito las que sugieren direcciones distintas para el tratamiento de la enfermedad de Chagas: la hipótesis de autoinmunidad sugiere la postura de tratamiento sólo durante  la fase aguda, en cambio, la de persistencia del parásito induciría a la del tratamiento en cualquier momento de la infección. Sin embargo el tratamiento con drogas tripanocidas en la fase crónica de la enfermedad es un punto controvertido a pesar que algunos autores sostiene que el tratamiento da al paciente la probabilidad de prevenir, disminuir y/o detener la evolución de la cardiopatía . Los que desalientan el tratamiento en pacientes en la etapa crónica aducen escasa posibilidad de beneficios clínicos claros y muchos efectos adversos. Es por ello que en el presente trabajo se analizó la conveniencia de realizar tratamiento en el estadío crónico de la Enfermedad de Chagas, con una droga tradicional como el Benznidazol y con Tioridazina, droga tricíclica de uso clínico habitual en psiquiatría que demostrara tener marcado efecto tripanocida y modificar la evolución de la infección previniendo la cardiopatía chagásica crónica . Para ello se infectaron ratones albinos suizos  con 50 tripomastigotes/animal y se los dividió en GI:  sin tratar (n: 25) , GII (n: 30) :tratados con Benznidazol (BZ), 100 mg/kg/día/animal/30 días, v/o, comenzando a los 180 días post-infección (dp)., GIII (n:25): tratados con Tioridazina (THI) 80 mg/Kg/día durante 12 días, a partir de 180 d.p.i., v/o, GIV (n:25): sin infectar. Se evaluó a los 215 y 320 dpi sobrevida, electrocardiografía y afinidad y densidad de receptores b cardíacos. El 100% de GII, sobrevivió hasta los 320 d.p.i., valor significativamente mayor (p<0.01) al encontrado en el  GI y GIII  a los 215 d.p.i. (67% y 88% respectivamente) y a los 320 d.p.i ( 26% y 77%).El 67% de GI presentó altraciones electrocardiográficas a los 320 dpi mientras que sólo el 33 % de los del GII y GIII (p<0.01). La afinidad de los reptores b estuvo disminuida en GI,II y III al compararla con GIV en cambio la densidad aumentada en GII y GIII con respecto a GI y GIV lo que implica un mecanismo compensador de la función (p<0.01). CONCLUSION: Estos resultados demostran un claro beneficio en tratar la cardiopatía chagásica crónica, sin embargo es indispensable profundizar las investigaciones acerca del riesgo-beneficio de los tratamientos con las drogas de uso habitual, o con aquellas que han demostrado tener menores efectos colaterales adversos o con la asociación de ambas.