IDEAN   23403
INSTITUTO DE ESTUDIOS ANDINOS "DON PABLO GROEBER"
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
GEOLOGÍA Y FASES DE DEFORMACION EN LA CORDILLERA PATAGÓNICA, NORTE DE CHUBUT (PARQUE NACIONAL LOS ALERCES)
Autor/es:
ANDRES ECHAURREN; MACARENA HENKEL; FRANCISCO RUSCONI; JONATHAN TOBAL; LUCIA SAGRIPANTI; MIGUEL RAMOS; DARIO ORTS; ANDRES FOLGUERA
Reunión:
Congreso; XIX Congreso Geologico Argentino; 2014
Resumen:
En el sector noroccidental de la Provincia de Chubut (~ 43°S) los Andes Norpatagónicos y la Precordillera Patagónica poseen características geológicas y estructurales producto de eventos meso-cenozoicos responsables de la construcción orogénica (Giacosa y Heredia, 1999; Orts et al., 2012). En la zona de transición de estos dos sistemas, las relaciones de contacto existentes entre las secuencias volcánicas de la Formación Lago La Plata (Jurásico Medio-Superior), las sedimentitas del Grupo Coyhaique (Neocomiano) y volcanitas del Grupo Divisadero (Cretácico Inferior tardío), permiten identificar el primer pulso compresivo que estructura la cordillera en este sector, el pulso principal neógeno subsiguiente y las mecánicas de deformación de cada estadio. La ampliamente descripta fase compresiva miocena desarrolla la faja plegada y corrida Norpatagónica o Ñirihuau (Ramos y Cortés, 1984; Giacosa y Heredia, 1999) que consolida el edificio andino. El objetivo de este trabajo es presentar evidencias geológicas de la tectónica jurásica extensional imperante en esta región, que a partir de su inversión, habría dado lugar a parte de las estructuras contraccionales identificadas, previamente a la actividad volcánica Aptiana-Albiana que caracteriza al Grupo Divisadero. En particular, la zona de estudio incluye al Cordón de Las Pirámides y el Cordón Situación (Figura 1), en la transición de los Andes Norpatagónicos a la Precordillera de Chubut. El Cordón Situación exhibe niveles estratigráficos inferiores al Cordón de Las Pirámides, por medio de un retrocorrimiento en su ladera occidental que exhuma niveles de la Formación Lago La Plata. Los afloramientos de estas secuencias volcánicas al sur del Alto El Dedal muestran geometrías de cuñas asociadas a fallas extensionales, lo que implica que las mismas son coetáneas a la acumulación de estas secuencias. Estas estructuras muestran grados de inversión variables a partir de fallas inversas de alto ángulo, que están cubiertas mediante discordancia angular por las volcanitas cretácicas del Grupo Divisadero. El mismo se encuentra caracterizado en esta región por una deformación leve en suaves pliegues sinformes, y una alteración supergénica que le otorga un color de meteorización diferente a los productos volcánicos jurásicos. En las inmediaciones al noreste y suroeste del Cordón Situación, los sedimentos clásticos de la Formación Ñorquinco (Mioceno Inferior), atribuidos al relleno de una cuenca de antepaís durante la expansión oriental del frente orogénico, se asocian a la etapa de contracción neógena. Estos estratos se encuentran adosados a las secciones cretácicas deformadas, lo que implica una reactivación neógena de este relieve (Ramos et al., 2011; Orts et al., 2012). Hacia el oeste, en el sector más oriental del Cordón de Las Pirámides, un corrimiento principal vergente al este monta las unidades intrusivas del Batolito Norpatagónico sobre los estratos volcánicos cretácicos. En el área, al sur del Lago Kruger (Figura 1), se observaron en el bloque inferior de dicho cabalgamiento capas monoclinales de calizas silicificadas, intercaladas con niveles de arcosas con laminación cruzada, de actitud N28°W/46°SW y que infrayacen a los estratos levemente deformados del Grupo Divisadero. Los niveles calcáreos no poseen indicadores faunísticos, y la cubierta vegetal en el afloramiento no permite una observación directa del contacto con el sobreyacente Grupo Divisadero. De acuerdo a los trabajos de De la Cruz et al. (1996) y Suárez y Márquez (2007), entre otros, el Grupo Coyhaique, cuyos asomos se han documentado en territorio chileno a sólo ~ 20 km al suroeste en los alrededores de la localidad de Futaleufú (Figura 1; SERNAGEOMIN, 2003), representa un evento transgresivo tithoniano-valanginiano en la Cuenca de Aysén, desarrollado aproximadamente entre 43-47° S, con una relación concordante sobre la Formación Ibáñez (Lago La Plata). Su miembro basal, la Formación Tres Lagunas (Ramos, 1981) o Formación Toqui (De la Cruz et al., 1996), posee características litológicas afines a la secuencia descripta en el Cordón de Las Pirámides. Por otra parte, estratos arenosos y calcáreos de edad jurásica inferior (expuestos entre 42° 30´- 44°30´ S) correspondientes a la ?Cuenca Liásica? de Suárez y Márquez (2007), fueron observados por Orts et al. (2012) en la zona del Cerro Plataforma, a ~ 60 km al norte del área de estudio, en discordancia angular bajo las volcanitas de la Fm Lago La Plata. Ante la ausencia de elementos faunísticos, las secciones sedimentarias descriptas en el Cordón de Las Pirámides representarían los vestigios más meridionales de la Cuenca de Aysén, o bien parte del borde occidental de la Cuenca Liásica. En este trabajo se interpreta que estos niveles corresponden al Grupo Coyhaique, en base a las observaciones de campo. Siendo las volcanitas del Grupo Divisadero los estratos sobreyacentes, una edad jurásica inferior resulta más difícil explicar, ya que se tendría una columna de roca de la Formación Lago La Plata erosionada, o un retrocorrimiento más profundo no reconocido en el campo, que deja a la sección jurásica en subsuperficie. En cambio, una edad neocomiana para estas capas es coherente con las relaciones de contacto inferidas, y además con el pulso contraccional identificado. A partir de los elementos colectados en el campo, se infiere un régimen extensional gobernante durante la actividad volcánica del Jurásico Medio-Superior, continuando hasta el Cretácico Inferior temprano con la depositación de las capas pelíticas y arenosas del Grupo Coyhaique. Posteriormente, un pulso compresivo post-neocomiano y pre ? Aptiano/Albiano invierte las estructuras extensionales previas y deforma los estratos calcáreos. Finalmente la actividad magmática del Grupo Divisadero marca una discordancia angular con los horizontes infrayacentes. Este evento contraccional reconococido en los sectores internos de la faja plegada y corrida cordillerana, es correlacionable con las fases deformacionales documentadas a estas latitudes en la región extraandina de Chubut (Márquez y Navarrete, 2011; Gianni et al., este congreso).