IGEBA   23946
INSTITUTO DE GEOCIENCIAS BASICAS, APLICADAS Y AMBIENTALES DE BUENOS AIRES
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
EROSIÓN DE LA LÍNEA DE COSTA ENTRE CAMET NORTE Y MAR DE COBO, PROVINCIA DE BUENOS AIRES, ARGENTINA
Autor/es:
MEDINA RUBÉN; MARTÍNEZ ANDREA
Lugar:
Córdoba
Reunión:
Congreso; XIX Congreso Geológico Argentino; 2014
Resumen:
Se conocen con certeza los importantes procesos erosivos que han sido provocados por la construcción del puerto de Mar del Plata a principios del siglo XX. Las sucesivas construcciones de defensa costera, en especial los espigones de las playas céntricas de esa ciudad y de Santa Clara del Mar, y la reciente construcción de escolleras necesarias para el tendido del emisario cloacal al norte del Partido de Gral. Pueyrredón, han contrarrestado localmente y de manera parcial los procesos erosivos en estos lugares. Sin embargo, la retención de arena en dichas playas ha incrementado aún más la erosión en los sectores ubicados al norte de estas áreas.En este trabajo se dan a conocer los datos preliminares sobre la tasa de erosión y la cantidad de material perdido durante el período 1965-2012 en el área comprendida entre el espigón Nº 7 de Camet Norte (37º 49´51´´S - 57º 29´35´´O) y el espigón Nº 3 de Mar de Cobo (37º 46´41´´S - 57º 26´57´´O), un sector de aproximadamente 7 km de costa localizado en el Partido de Mar Chiquita, en la Provincia de Buenos Aires (Fig. 1a). Trabajos previos en este sector y en zonas aledañas fueron llevados a cabo por Schnack et al. (1983), Merlotto y Bértola (2009), SanMartín (2012) y Bértola et al. (2013). Para calcular la tasa de erosión se recurrió a un análisis multitemporal del período comprendido entre julio de 1965 y diciembre de 2012, empleando, entre otras, la Hoja 3757-33-1 y 3 del I.G.N. de julio de 1965 (1: 50.000), fotografías aéreas del S.H.N. del año 1994 (1: 10.000 aprox.) y una imagen satelital del Google Earth de alta resolución de diciembre de 2012 (pixel menor a 10 m). Asimismo, desde julio de 2011, se inició un programa de mediciones sistemáticas trimestrales del retroceso del frente costero en tres puntos seleccionados dispuestos entre ambas localidades (Fig. 1a). Éste consiste en la medición de la distancia comprendida entre el tope de una estaca hincada en la playa y la base del acantilado. Para estimar la pérdida de material se levantaron distintos perfiles estratigráficos durante el invierno con la finalidad de obtener el espesor (e) de cada capa. Dicha tarea se realizó en ese período del año pues el nivel de arena en la playa es menor y por ende se puede observar sin dificultad la base del acantilado. Además se tomaron muestras sedimentarias con el fin de calcular las respectivas densidades () de cada una de esas capas. Para el cálculo de superficie (s) se empleó un programa de computación (MapInfo). La pérdida de material se obtuvo mediante la sumatoria de e x  x s calculado para cada capa. En el período analizado (1965-2012) se obtuvo un retroceso promedio de 79 m a razón de 1,66 m/año, con un valor máximo de 111 m (2,33 m/año) y un valor mínimo de 54 m (1,13 m/año). No obstante, las mediciones in situ, realizadas entre 2011 y 2013, arrojaron valores menores. Sólo en la estaca IV se registró un retroceso promedio de 0,80 m/año, en tanto que en las otras dos estacas los valores fueron insignificantes. Por su parte, la cantidad de material perdido por erosión se estima en 2,6 Mt de material en seco, correspondiendo el 83% al área comprendida entre el espigón Nº 7 y el punto A, ubicado éste al NE de la estaca II (ver Fig. 1a). Los menores valores obtenidos en el campo pueden ser explicados al menos por dos motivos. El primero y principal consiste en el reducido lapso de tiempo en que se han llevado a cabo las mediciones (tan sólo 2 años y 3 meses), y el segundo radica en que las estacas fueron colocadas en pequeñas entrantes de la costa. Por otra parte se verifica que el máximo retroceso se produce en sectores puntuales en cortos períodos de tiempo, por ejemplo en un único evento de tormenta marítima. Tal es así, que la estaca IV registró un retroceso de 1,55 m en tan solo dosmediciones consecutivas realizadas en diciembre de 2012 y abril de 2013. Esto corresponde aproximadamente al 90% del retroceso total en ese sector durante el período de medición (un total de 1,76 m entre julio de 2011 y octubre de 2013). Estos rápidos cambios del contorno costero se observan con mayor frecuencia en las pequeñas salientes de la costa, registrándose la conformación de arcos marinos devenidos en pocos meses en pilares marinos hasta su total desaparición (Fig. 1b). Es probable que en el futuro las tasas de erosión se incrementen debido al ascenso del nivel medio del mar y al aumento en intensidad y frecuencia de las tormentas marítimas como consecuencia del actual calentamiento global. Las medidas de mitigación tomadas hasta el presente, tales como la construcción de un nuevo espigón a fines del año 2011 (Fig. 1a) y la frecuente incorporación de bloques de cuarcita en forma paralela a la costa (acorazamientos), no sólo han producido resultados parciales sino que, en nuestra opinión, podrían afectar, si ya no la han hecho, de manera negativa al turismo de la zona, al obstaculizar el libre tránsito por la playa y al ser estéticamente no agradables a la vista. Sin embargo, la continuación en el tiempo de los procesos de refulado en la boca del puerto de Mar del Plata, podrían hacer disminuir la tasa de erosión prevista sin afectar, no solo el valor turístico sino el traslado de la erosión a playas ubicadas más al norte por la retención de arena en este lugar.