INVESTIGADORES
PIGLIA Melina
congresos y reuniones científicas
Título:
'¡Conozca su patria: veraneé!'. Los orígenes del turismo en automóvil en la Argentina. 1920-1950
Autor/es:
PIGLIA, MELINA
Lugar:
Mar del Plata
Reunión:
Jornada; V Simposio Internacional y XI Jornadas Nacionales de Investigación-Acción en Turismo; 2011
Institución organizadora:
Centro de Investigaciones Turísticas, Facultad de Ciencias Económicas y Sociales, UNMdP
Resumen:
Exótico juguete de lujo en los primeros años del siglo XX, tras la Primera Guerra el automóvil se difundió rápidamente en la Argentina entre la elite agroganadera primero y entre sectores medios y medios altos, después. La acelerada difusión del automóvil en la Argentina implicó también el advenimiento de una cultura conformada en torno al automóvil, a la velocidad, al movimiento. Este trabajo procura contribuir al análisis del impacto de la cultura del automóvil en el turismo, haciendo foco en la emergencia del turismo en automóvil en la primera mitad del siglo XX.  Desde el punto de vista teórico, el trabajo se enmarca en los postulados de la historia social y se basa en una metodología centralmente de tipo cualitativo, de análisis crítico y cruce entre documentos oficiales (memorias de la dirección de parques nacionales), revistas y prensa de época y fotografías. La construcción y/o el uso de algunas series de datos (cantidad de automóviles, cantidad de viajeros en determinados destinos, etc), complementa esta mirada. La difusión del automovilismo en la Argentina fue un proceso casi simultáneo con el desarrollo de lo que podríamos llamar el ?turismo nacional?: una práctica moderna que implicaba un desplazamiento dentro del país con fines recreativos por un período acotado de tiempo, asociada a la generalización de las vacaciones en los usos de los profesionales liberales y los sectores medios de comerciantes o industriales, desde finales de los años veinte y durante los años treinta, y entre los asalariados, algunas décadas más tarde. El automóvil jugó un rol importante en el desarrollo de este tipo de turismo al hacer posible el viaje individual o en familia independiente del trazado vial, estimular una serie de prácticas turísticas nuevas, como el camping, y alentar el surgimiento de nuevos lugares turísticos. El viaje de largo aliento en automóvil fue en sus comienzos un asunto de pioneros que narraban sus aventuras en clave heroica y patriótica. La novedad de los años treinta y cuarenta fue que, en el marco de una mayor integración material del territorio nacional a partir sobre todo la obra vial, el imperativo de conocer la Patria profunda comenzó a dirigirse a los sectores medios y se amalgamó con el proceso de mercantilización de los lugares turísticos, contribuyendo a la vez a la integración simbólica del territorio y al refuerzo de la identidad nacional. Así, la emoción patriótica comenzó a aparecer como uno de los atractivos a consumir, a través de una práctica previsible (el viaje de vacaciones por una o dos semanas), codificada y prefigurada por una pedagogía turístico patriótica que, a través de las páginas de guías y revistas indicaban al turista qué y cómo mirar e incluso, a veces, cómo sentirse frente a ello.