BECAS
RIGANTI MarÍa Valentina
congresos y reuniones científicas
Título:
Políticas públicas y debates feministas
Autor/es:
GRACIELA HERNÁNDEZ; ANA CLARA DENIS; MA. VALENTINA RIGANTI
Lugar:
Mar del Plata
Reunión:
Congreso; II Congreso ?Políticas Públicas contra las Violencias?; 2022
Institución organizadora:
Ministerio de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual de la provincia de Buenos Aires
Resumen:
Esta ponencia surgió como consecuencia del intercambio de ideas con el eje centralde pensar en proyectos para propiciar la participación en la esfera social y económica demujeres de áreas rurales y periurbanas, con difícil acceso al empleo y a la participaciónsociopolítica. Esta situación de encuentro de ideas nos llevó a recuperar, y de algunamanera sintetizar, los caminos transitados por la teoría y las prácticas de losfeminismos.Nos interesa especialmente retomar algunos de los debates planteados por NancyFraser. Para la autora la segunda ola del feminismo (en Estados Unidos y Europa)seguía disfrutando de la prosperidad que siguió a la Segunda Guerra Mundial, la gestióneconómica keynesiana había logrado el desarrollo económico y Estados de bienestarmás o menos institucionalizados que descansaban en “una serie de exclusiones degénero y etnorraciales, por no mencionar la explotación colonial externa” (Fraser,2015:19). Género, etnia, raza y colonialismo fueron líneas de fractura para la “edad deoro del capitalismo”.Esta situación de bienestar económico de la burguesía blanca norteamericana, en lacual se esperaba que los hombres ocupaban los roles productivos y las mujeres losreproductivos dio lugar a un libro muy importante -valorado y denostado a la vez-llamado La mística de la feminidad, publicado por Betty Friedan en 1963. En estetrabajo de investigación la autora focaliza en el “malestar que no tiene nombre” porparte de las mujeres, a las que se alejó de la vida política y del mundo del empleo, conconsecuencias negativas sobre sus vidas. Dice Amelia Valcárcel en el prólogo a estaobra: “Con el auxilio de los empleadores, la industria y los medios, toda una generaciónde mujeres, cuyos novios y maridos habían hecho la guerra, fue persuadida u obligada aque dejase sus empleos y volviera a la situación tradicional en el matrimonio.” (Friedan,2020: 12)Si para Friedan la exclusión de las mujeres de la órbita del salario y del empleoremunerado se dio en la sociedad norteamericana de posguerra, para Silvia Federici esteproceso tiene mucha más profundidad histórica, y se trata de un componente estructuraldel capitalismo moderno. En Calibán y la bruja (2010) analiza la situación de lasmujeres en la transición del feudalismo al capitalismo, en este libro discute y hacecorrecciones a las teorías de sus compañerxs socialistas con respecto al lugar de lasmujeres en los procesos de acumulación de capital. Considera que no tenían en cuenta laexclusión de las mujeres en el desarrollo capitalista, que sostenían que la “opresión” y lasubordinación a los varones era un residuo de las relaciones feudales y que no pensabanque la explotación de las mujeres había tenido una función central en el proceso deconsolidación capitalista, esa función era: la producción y la reproducción de la fuerzade trabajo.En la década del 1960 la estabilidad imperante se agitó, el feminismo de la segundaola integró los nuevos movimientos sociales que cuestionaba al clasismo, el sexismo yla heteronormatividad. Este feminismo convirtió a “lo personal” en un tema político,estos nuevos planteos ampliaron los límites de la protesta más allá de la distribucióneconómica, con la inclusión de la reproducción y la sexualidad. Es así, que observaronal paternalismo de las políticas públicas y el androcentrismo del sistema capitalista.Según Fraser, las primeras feministas de la segunda ola intentaron transformar al Estadode bienestar para desarticular la dominación masculina, no estaba en sus metasdesmantelarlo. Aunque también nos recuerda que la crítica feminista al “salariofamiliar” y al paternalismo del Estado de bienestar ha confluido con las críticas alneoliberalismo al “estado niñera”.En la década de 1980 el auge conservador pudo de nuevo en un lugar destacado alneoliberalismo antes denostado. Los movimientos feministas habían perdido el respaldodel Estado de bienestar y ya no parecían posibles las ideas radicales, es así, que sedirigieron hacia otras políticas, se entró en la política del reconocimiento. Para la autoraeste giro dentro del feminismo ya no se propuso transformar la economía, sino lacultura. Considera que no se logró la redistribución económica ni el reconocimientocultural. Opina que el feminismo debe mantener la distancia con el neoliberalismo yunirse a movimientos emancipadores.El movimiento feminista en la Argentina estuvo influenciado por lo que ocurría enEuropa y Estados Unidos, por las distintas “olas”, pero en los últimos años hemos vistoal surgimiento de feminismos que abrevan en otras vertientes, es así, que noencontramos con un variado abanico de feminismos que de alguna manera desembocanen el “feminismo popular”.Las políticas públicas para el trabajar la temática de las asimetrías de géneropresentan todo un abanico de opciones, en este caso se presentará una matriz de análisisdestinada a la evaluación de políticas públicas para la igualdad de género (Benavente yValdés, 2014). La misma hace aportes para pensar las políticas públicas en su contextoy tomando en consideración la dimensión diacrónica, lo cual permite identificar losprocesos de creación, desarrollo e implementación de cada una de ellas.Su estructura permite Identificar los problemas a abordar por cada política deigualdad, así como los objetivos, su formulación y diseño, y su transversalización endistintas áreas del Estado. Asimismo, evalúa la sostenibilidad, los resultados y elmonitoreo realizado por organizaciones de la sociedad civil.Destacamos que el hincapié de este enfoque en la territorialidad e historicidad depolíticas que sostiene y ha sostenido el Estado permite reconocer las formas en quedistintos actores interactúan entre sí en la configuración de “lo público” desde marcosteóricos diversos y, en algunos casos, contrapuestos. Así, podemos desandar la trama deacuerdos y debates que se extiende por detrás del desarrollo y sostenimiento de unapolítica de igualdad, marcando sus potencialidades y también sus límites.Por último, cerraremos este recorrido poniendo el foco en el concepto deempoderamiento, para poder comprender el recorrido de su uso y su relación con elpoder. (León; 1997)