INVESTIGADORES
HECKER Yanina Paola
congresos y reuniones científicas
Título:
ABORTO EN CIERVAS COLORADAS (Cervus elaphus) CAUSADO POR Neospora caninum: PRIMER CASO REPORTADO
Autor/es:
SOLER J.; URTIZBIRIA F.; HECKER Y.P.; CIRONE, K.M.; SCIOLI M.V.; FIORENTINO MA; LOUGE E.; CANTON G.J.; VERNA A.; MORRELL E.; MOORE D.P.
Reunión:
Seminario; ?XII Reunión Argentina de Patología Veterinaria? (RAPAVE 2021) y el ?14° Seminario de la Fundación CL Davis-SW Thompson en Argentina?; 2021
Institución organizadora:
Asociación Argentina de Patología Veterinaria
Resumen:
La neosporosis es la principal causa de abortos en bovinos en todo el mundo, aunque también se han informado pérdidas reproductivas en otros rumiantes domésticos como ovejas y cabras. En ciervos colorados, la infección con dicho protozoo ha sido demostrada a través de análisis serológicos. Sin embargo, hasta el momento no existen reportes de abortos causados por Neospora caninum en dicha especie. El presente trabajo describe la presentación de abortos causados por la infección con N. caninum en un rodeo comercial de ciervas coloradas localizado en la provincia de Buenos Aires. El rodeo estaba constituido por 81 hembras que recibieron servicio natural durante 61 días. El periodo gestacional fue monitoreado en su totalidad mediante la realización de 3 ecografías, para detectar mortalidad fetal y/o abortos, dada la dificultad en el hallazgo de fetos abortados en condiciones de campo. La tasa de preñez fue de 97.5%, mientras que la de aborto un 25.3%. Se lograron detectar mediante ultrasonografía 3 fetos muertos, 2 de los cuales tenían ausencia de latido cardaco, extraídos mediante operación cesárea (fetos A y B), mientras que el tercer feto (feto C) fue detectado muerto retenido en vagina y extraído manualmente. Los 3 fetos y sus respectivas placentas fueron remitidos al laboratorio para ser analizados. Se realizó inmunofluorescencia indirecta (IFI) sobre fluidos fetales para la detección de N. caninum y Toxoplasma gondii. Para Campylobacter fetus se realizó inmunofluorescencia directa sobre líquido de abomaso. La detección de ADN de N. caninum y T. gondii fue hecha mediante PCR sobre placenta y tejidos fetales. Finalmente, la búsqueda de lesiones compatibles y la detección del parásito in situ se realizó mediante histopatología e inmunohistoquímica (IHQ) de muestras de tejidos en formol. Además, se tomaron muestras estériles para cultivo y aislamiento bacteriano, viral y de Tritrichomonas foetus. A las ciervas detectadas como abortadas se les tomó una muestra de sangre al momento de la detección del aborto, mientras que a la totalidad de las ciervas servidas se les tomó una muestra de sangre al momento de la última ecografía (15 días previos al inicio de la parición) para realizar análisis serológicos de N. caninum y T. gondii mediante IFAT y de B. abortus mediante ELISA de competición. El feto A era hembra, se encontraba momificado, tenía una edad 117 días de gestación. El diagnóstico histopatológico reveló elevado grado de autólisis, meningoencefalitis necrótica no supurativa y gliosis multifocal, miocarditis multifocal no supurativa moderada, placentitis necrotizante no supurativa severa, neumonía intersticial difusa y glositis no supurativa. El fluido fetal de este especímen resultó positivo a la IFI y en la lesiones halladas se detectó a N. caninum mediante IHQ. El feto B era macho, de aspecto fresco, con poco tiempo de muerto y una edad de 115 días. No se observaron alteraciones macroscópicas evidentes y el diagnóstico histopatológico fue encefalitis multifocal necrotizante no supurativa, pancarditis necrotizante multifocal no supurativa severa, linfadenitis leve, miositis necrotizante multifocal severa en músculos esqueléticos, retroocular y diafragma, nefritis multifocal no supurativa, glositis multifocal no supurativa y hepatitis multifocal necrotizante no supurativa severa. Resultó positivo a la IFI, a PCR y a la IHQ para N. caninum. El feto C era macho, presentó cierto grado de momificación y autólisis, tenía una edad de 87 días, los hallazgos histológicos fueron meningoencefalitis no supurativa necrótica multifocal, miocarditis no supurativa severa, miositis severa no supurativa, neumonía intersticial leve, placentitis necrotizante multifocal, glositis no supurativa multifocal y hepatitis necrotizante multifocal no supurativa. Este último feto resultó positivo a la IFI y a la PCR para N. caninum y para T. gondii. El aislamiento bacteriano, viral, de Tritrichomonas foetus resultaron negativos en los 3 fetos. Por último, las tasas de seropositividad fueron 66,7%, 67,9% y 0% para N. caninum, T. gondii y B. abortus respectivamente. Se encontró asociación entre seropositividad a N. caninum y abortos (OR= 5,7). Por otro lado, las hembras que abortaron tuvieron mayor probabilidad de ser seropositivas a N. caninum que las ciervas que destetaron cría (OR= 5,4). Las madres de los fetos A, B y C presentaron títulos a N. caninum de 6400, 25600 y 25600 respectivamente. No se encontró asociación entre seropositividad y abortos para T. gondii. Las alteraciones histopatológicas halladas en los fetos son compatibles con infección por protozoo, mientras que los resultados positivos a IHQ, PCR e IFI confirman que el agente causal fue N. caninum. La presencia de títulos altos a dicho protozoo en las madres de los fetos analizados, así como la asociación encontrada entre seropositividad y abortos, están en concordancia con dicho diagnóstico. El presente caso representa el primer diagnóstico reportado en el mundo de abortos causados por N. caninum en ciervas coloradas.