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El debate alrededor de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual (LSCA) tuvo a los medios comunitarios e indígenas como protagonistas. Participaron activamente en los foros y convocatorias para realizar aportes al proyecto. La norma sancionada en 2009 reconoció legalmente ambas modalidades de comunicación, reservó un porcentaje del espectro radioeléctrico para sus emisoras y estableció un mecanismo de fomento inédito, con recursos garantizados, para estas experiencias. La puesta en marcha de la ley supuso entonces la posibilidad de mejorar las condiciones para su desarrollo. En efecto, las investigaciones más abarcadoras dieron cuenta de la multiplicación federal de emisoras comunitarias e indígenas a partir del debate y la posterior sanción de la LSCA y del aporte que significó para estos medios la puesta en marcha del Fondo de Fomento Concursable para Medios de Comunicación Audiovisual (FOMECA). Las modificaciones que realizó el macrismo a la LSCA con el Decreto de Necesidad y Urgencia 267, a poco de iniciado su mandato, no lesionaron los artículos directamente vinculados al reconocimiento legal y al fomento de los medios comunitarios e indígenas. Sin embargo, el ascenso de Cambiemos al Ejecutivo Nacional planteaba interrogantes sobre las formas que asumiría la implementación de ese apartado de la normativa y sobre las características que tendría su vinculación con ese subsector. Las dudas crecieron en julio de 2016 cuando la comisión encargada de la redacción de un nuevo proyecto de ley sobre el audiovisual y las telecomunicaciones presentó 17 principios guías. Entre ellos, el último punto dejaba ver una mirada paternalista y acotada sobre los medios comunitarios. Se los vinculaba con ?poblaciones con singularidad cultural, social o en representación de colectivos diversos, poblaciones distantes o de difícil acceso?. También se deslizaba un sesgo restrictivo en torno al fomento: ?Se incentivarán mecanismos de financiación para los medios de zonas rurales, de zonas de frontera y de los pueblos originarios?. Finalmente, el FOMECA tuvo continuidad durante el gobierno de Cambiemos, aunque se constató la ralentización del proceso, la subejecución del presupuesto y la burocratización del funcionamiento, que desincentivó la participación en el mismo. A partir de estas constataciones, este trabajo indaga en los factores que intervinieron en la implementación de esta iniciativa estatal y permiten explicar las características que la definieron en el periodo. Se intenta reconocer las fallas en la aplicación de una política pública en el marco de un cambio de gobierno y del recambio del directorio en la autoridad de aplicación.

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