INVESTIGADORES
MIOTTI Laura Lucia
capítulos de libros
Título:
La Obsidiana en el Nesocratón del Deseado (Santa Cruz, Argentina): extractos de una oscura biografía.
Autor/es:
D. HERMO; MIOTTI, L.
Libro:
BIOGRAFÍAS DE PAISAJES Y SERES: VISIONES DESDE LA ARQUEOLOGÍA SUDAMERICANA
Editorial:
Encuentro Grupo Editor y Editora UNCatamarca
Referencias:
Lugar: Córdoba; Año: 2011; p. 111 - 131
Resumen:
Las rocas fueron y son sumamente importantes en la vida de los cazadores-recolectores no sólo como materia prima para la producción de tecnologías, sino también como seres y objetos reflejos (metafóricos y/o miméticos) de ancestros o de seres sobrenaturales poderosos. Así percibidos, actúan dinámicamente dentro de complejos ideacionales como mediums entre los humanos y el mundo mágico. Del mismo modo, y dentro de los pueblos con percepciones animistas del mundo, otros rasgos del paisaje, como los afloramientos minerales, las cuevas, los árboles, los animales o el agua son dotados de poder (Saunders 2001).  En las cosmovisiones americanas el mundo físico es visto como una entidad viviente, un ser dinámico, capaz de establecer una interacción con los humanos y los planos sobrenaturales (ver trabajo de M. Vilca en este mismo volumen): la vinculación con los rasgos del paisaje dota de poder a los artefactos.  “Minerals are integral parts of larger entities, such as mountains, volcanoes, lakes, and valleys, and retain parts of the (often mythological) significance accorded to these landscapes features” (Saunders 2004:137).  El brillo y el color son características de las materias que pueden ser tomadas como manifestaciones de poder: “yet, throughout the Americas, varying attitudes appear to have cohered around a shamanic worldview where light, dazzling colours and shiny matter indicated the presence of super-natural beings and essence” (Saunders 1999:245). Este estatus dinámico de las rocas y los minerales, con los humanos y su paisaje confiere otra característica a las rocas, que es la de acumular tiempo, y ese tiempo es historia junto a humanos (Goshden y Marshall 1999), una historia de significaciones y resignificaciones. Los objetos naturales adquieren sus valores culturales en virtud de su origen en sectores del paisaje animados por fuerzas y seres míticos; la manufactura de objetos brillantes y/o coloridos materializa esta energía del brillo o color, transmitiéndola a los artefactos a través de opciones tecnológicas relacionadas, cuya eficacia radica en la sinergia mítica, el conocimiento ritual y las capacidades técnicas involucradas (Saunders 1999, Jones y MacGregor 2002). De esta forma, las biografías culturales, lejos de ser ensayos sobre la vida útil de los artefactos en el sentido procesualista, representan metáforas de las interacciones entre objetos y humanos, ya que son estos últimos quienes definen el sentido de los primeros.  Gosden y Marshall (1999:169