El catolicismo y la modernización urbana en Buenos Aires. Notas sobre las transformaciones en la movilización católica, 1910-1934

MIRANDA LIDA

Catolicismo y sociedad de masas. Argentina, 1900-1950

Ediciones Prohistoria

Lugar: Rosario, Argentina; Año: 2009; p. 17 - 37

En las memorias y relatos de época que hablan de la Buenos Aires de comienzos de siglo XX, es raro encontrar referencias a la presencia católica en el entramado urbano. Buenos Aires crecía día a día en todos los sentidos posibles: se desarrolló el centro de la ciudad, y también lo hicieron sus barrios, su edificación y su red de transportes; se multiplicó exponencialmente su población; se complejizó su entramado social y cultural. La ciudad fue capaz de sorprender a los visitantes en ocasión del Centenario, gracias a la intensidad de su crecimiento económico, su desarrollo urbano, su vitalidad. Se construyeron edificios y vías de circulación que fueron emblemáticos de la temprana modernización de comienzos de siglo: entre otros, la inauguración del nuevo edificio del Congreso Nacional en 1906, el nuevo Teatro Colón estrenado en 1908 o el tendido del primer subte porteño, que vio la luz en 1913. Pero el catolicismo parecía brillar aquí por su ausencia. Las iglesias, si bien no pocas, solían de un modo u otro pasar inadvertidas en el escenario urbano de Buenos Aires. Algunas por estar demasiado apartadas; otras por no contar con las dimensiones apropiadas para una ciudad que se hacía cada día más grande. Como dice Manuel Gálvez, no había nada comparable a la catedral de Burgos, y quizás por eso se podía tener la impresión de que el catolicismo prácticamente no existía en Buenos Aires. En este marco, y por contraste, el Congreso Eucarístico Internacional de 1934 logró llamar poderosamente la atención.