INVESTIGADORES
BLANCO Mariela Cristina
artículos
Título:
"Una genealogía de la violencia: Borges-Bioy y Germán Rozenmacher"
Autor/es:
BLANCO, MARIELA CRISTINA
Revista:
Hispamérica
Editorial:
Hispamérica-Universidad de Maryland
Referencias:
Lugar: Rockville; Año: 2012 vol. XLI p. 37 - 44
ISSN:
0363-0471
Resumen:
En un proyecto mayor, financiado por CONICET y que recién se inicia, busco estudiar las resonancias del nacionalismo argentino en ciertos textos borgesianos; dentro de este marco general, inscribo esta ponencia con el objetivo de comenzar a trazar algunas proyecciones de la sintaxis de la violencia que se configura en un relato un tanto atípico dentro de la producción del autor, como es ?La fiesta del monstruo?, escrito en colaboración con Bioy Casares.[1] El calificativo de ?atípico? obedece a que, como sabemos, Borges rehusó la alusión directa al contexto en la mayor parte de su producción, pero en este texto las referencias directas tornan ineludible una lectura que lo inscriba dentro de las coordenadas temporales que coinciden con el contexto de producción, pero cuyos antecedentes y proyecciones trasvasan esa delimitación. Así, pretendo comenzar a ver cómo este cuento en clave de sátira antiperonista es una pieza vertebrante de una genealogía de escrituras de la violencia dentro de nuestra literatura. Al respecto, resultan operativas las consideraciones de Nancy Fernández al afirmar que hay una ?vasta porción de la literatura argentina [?] [que] establece sus lazos de filiación sobre la fiesta y el crimen, asociados a la risa, la irracionalidad, la violencia y el pánico ante el trance de muerte por tortura o por degüello; en otras palabras, por agresión al cuerpo? (1996: 30). Desde esta perspectiva, los conceptos de genealogía y reescritura permiten abordar los textos desde las operaciones de repetición y desplazamiento.[2] Creo que el juego de lecturas liberado de ciertos imperativos lógicos, como linealidad y causalidad, que son precisamente los que deconstruye Borges en su célebre ensayo ?Kafka y sus precursores?, me permitirá arribar a caracterizar ciertos procedimientos de la sintaxis narrativa de la violencia que singularizan este texto y que son resignificados en otros que, al mismo tiempo, modifican la lectura del ?ancestro?. Tanto el  epígrafe de ?La refalosa? como la similitud entre las escenas de asesinato en relación con ?El matadero?, resultan puntos ineludibles del linaje de ?La fiesta?. Pero en este caso, proponemos una mirada prospectiva con el objetivo de demostrar que en este texto se cristalizan ciertos procedimientos que luego serán retomados en relatos de la violencia posteriores, como ?Cochecito? y ?Cabecita negra?, de Germán Rozenmacher.[3] [1] Como se sabe, los avatares de la circulación de este cuento, fechado en 1947, son complejos. De acuerdo al testimonio de Rodríguez Monegal, ?este relato circuló en manuscrito y sin nombre de autor, subterráneamente, en el Río de la Plata. Fue publicado a la caída de Perón, y aún así, sólo en Montevideo, en la sección literaria del semanario Marcha, que entonces yo dirigía (1977: s/n)?. Luego, se incluye en el libro Nuevos cuentos de Bustos Domecq, firmado con los nombres propios de los autores, en 1977. [2] Tomo la concepción general de reescritura de la teoría kristeviana, que tiende a enfocar el fenómeno literario como una infinita red de conexiones, articulada sobre las operaciones de repetición y diferencia. Esta perspectiva parte de la recuperación del sentido primigenio de leer como ?recoger?, ?recolectar?, ?espiar?, ?reconocer las huellas?, ?coger? y hasta ?robar? (Cfr. Kristeva, Julia (1981). Semiótica I. Madrid: Fundamentos, p. 236). De aquí emergen al menos dos consideraciones: la primera, la lectura como paso previo e indisociable de la escritura; la segunda, que esa doble operación conlleva una activa apropiación, una deglución de voces ajenas que resultan sometidas a procesos de transformación, dando lugar a una nueva productividad. [3] Hablo de relato en el sentido que le otorga Sebreli a este concepto, para contraponerlo al de cuento, destacando, principalmente, su carácter de incompletud y fragmentarismo. (Sebreli, Juan José (1986). ?Estudio preliminar?. En: Kordon, Bernardo. Un taxi amarillo y negro en Pakistán y otros relatos kordonianos. Buenos Aires: Sudamericana). El cuento ?Cabecita negra? integra el volumen homónimo (1962), mientras que ?Cochecito? se incluye en Los ojos del tigre (1967).