CERZOS   05458
CENTRO DE RECURSOS NATURALES RENOVABLES DE LA ZONA SEMIARIDA
Unidad Ejecutora - UE
artículos
Título:
Sistemas de labranza en el sudoeste bonaerense: efectos de largo plazo sobre las formas de fósforo en el suelo
Autor/es:
GALANTINI JUAN A.; SUÑER LILIANA; IGLESIAS JULIO O.
Revista:
RIA
Editorial:
INTA
Referencias:
Lugar: Buenos Aires; Año: 2007 vol. 36 p. 63 - 81
ISSN:
0325-8718
Resumen:
La siembra directa (SD) produce una modificación del ambiente edáfico y cambios en el ciclo de la materia orgánica (MO), con la consecuente modificación de los equilibrios de las formas de P y su disponibilidad para los cultivos. El objetivo del presente trabajo fue evaluar los efectos luego de 18 años de diferentes sistemas de labranzas sobre la cantidad y distribución de diferentes formas P en el suelo. Se utilizó un Argiudol típico, de textura franca en el horizonte A del partido de Tornquist (BA). Se determinaron el pH y las formas de P extraíble (Pe), orgánico (Po), inorgánico (Pi) y total extraíble (Pte), calculándose el P ocluido (Pocl) como la diferencia entre el Pte - (Pi+Po). Las diferencias en la concentración (µg g-1) del Po entre labranzas fueron pequeñas y no significativas, mientras que el Pi aumentó en superficie en SD, indicando buenas condiciones para la mineralización de las formas orgánicas. La concentración de Pte en el horizonte A fue en promedio 654 µg g-1. En LC el pH tuvo un valor promedio de 6,6 en los 0-20 cm, mientras que en SD fue significativamente menor entre 0 y 15 cm de profundidad. Los cambios en la concentración del Pe estuvieron asociados más al contenido (kg ha-1) que a la concentración de las diferentes formas de P, y reflejarían un efecto combinado de mayor Pi y Po en superficie. El contenido de las diferentes formas de P fue mayor en SD que en LC, posiblemente por la mayor pérdida de suelo por erosión ya reportada en un estudio previo. El cambio anual entre sistemas en el horizonte A fue de 3,5, 1,7 y 9,4 kg ha-1 año-1 para el Po, Pi y Pte, respectivamente. El cambio en el Pocl fue 4,2 kg ha-1 año-1, lo que estaría indicando que las labranzas favorecerían el pasaje de las formas resistentes de P a más lábiles, de todos modos, la reserva de Pi disminuyó. La cantidad promedio exportada con los granos fue 10,9 y 9,4 kg de P ha-1 año-1 para SD y LC, respectivamente. En cuanto al contenido de P en los residuos que serán incorporados a la fracción orgánica y reciclado, osciló entre 3,5 y 3 kg ha-1 año-1 para SD y LC, respectivamente. Si bien la cantidad de P reciclada en SD fue mayor, también aumentó la exportación, generando una necesidad mayor de fertilizante. La mayor parte de las pérdidas de Pi (87%) se localizaron en la profundidad 0-5 cm.