Arte Forense


Fisonomía forense: reconstruye las características de un rostro con la ayuda de materiales moldeables. Utiliza un molde de cráneo de plástico con varias capas de material para simular la piel, espátulas de escultor y pinturas. En muchas agencias se utilizan programas de computadora para modelar huesos, músculos y piel en 3D. El retrato compuesto o hablado, realizado a partir de la memoria de la víctima, es el más famoso, pero también se llevan a cabo dibujos con base en videos y fotos y progresiones de edad en caso de personas desaparecidas. Utilizan un restirador, lápices, testimonio, ya sean verbales o con fotos y videos, para ofrecer opciones al artista.

Fotografía forense: la participación del profesional para realizar la fijación fotográfica de la escena y todo lo relacionado con la misma es fundamental; sin embargo, es sólo la primera parte de su trabajo, ya que posteriormente tendrá que trasladarse al laboratorio de fotografía forense para llevar a cabo el revelado del material con el que serán ilustrados los dictámenes. La fotografía forense se convierte en el complemento perfecto al momento de realizar una investigación criminal, debido que al fotografiar la totalidad de la escena se logran apreciar indicios de los hechos, que son captados al momento de realizar la inspección ocular. Todas las pruebas que se encuentran plasmadas en la fotografía son de carácter instantáneo y permanente, proporcionando datos que pasarían desapercibidos durante la observación a simple vista de las personas, lugares u cosas.

Volver al programa

Programa Nacional de Ciencia y Justicia – cienciayjusticia@conicet.gov.ar