RELACION DEL BANCO DE SEMILLAS CON LA PRECIPITACION Y LA TEMPERATURA EN EL NOROESTE DE LA PATAGONIA.

GONZALEZ SOFÍA; GHERMANDI LUCIANA; BECKER GUILLERMO

Calafate, Santa Cruz, Argentina

Congreso; V Reunión del Grupo Regional Patagónico de Ecosistemas de Pastoreo; 2003

El fuego es un componente integral en la dinámica de la vegetación de los pastizales del noroeste patagónico. La precipitación y la temperatura que se registran en los años posteriores a un incendio influyen sobre la producción de semillas de las plantas que lo integran. Durante tres años, se estudió la relación entre la densidad y riqueza del banco de semillas postfuego con la precipitación y la temperatura registradas durante la estación de crecimiento (setiembre-diciembre) y el período invernal (mayo-agosto). El estudio se realizó en un pastizal dominado por Stipa speciosa y Festuca pallescens del noroeste de la Patagonia, incendiado en enero de 1999.  Los muestreos fueron realizados en abril de 1999, 2000 y 2001, en dos sitios diferentes: sitio control (C) y sitio quemado (B). Las muestras de suelo se sometieron a estratificación en frío y se colocaron a germinar en invernadero en la primavera siguiente a cada muestreo. Semanalmente se contaron, identificaron y removieron las plántulas emergidas.  Para el análisis de los resultados, el número de semillas de cada especies (estimado por el número de plántulas emergidas por metro cuadrado) fue agrupado en 5 grupos funcionales: herbáceas anuales, herbáceas perennes, pastos anuales, pastos perennes y arbustos. En ambos sitios, los bancos de semillas 2000 y 2001 presentaron un número total de semillas/m² (NTS) significativamente mayor (p<0,05) al banco de semillas 1999.  Aunque el NTS fue menor en el banco 2001, comparado con el 2000, estas diferencias fueron significativas en el sitio control (C99=850, C00=2486, C01=2312; B99=973, B00=3732, B01=3715 semillas/m²) (fig. 1). Durante los tres años de muestreo, los dos grupos funcionales que aportaron el mayor número de semillas fueron las hierbas anuales (HA) y las hierbas perennes (HP). Los restantes grupos contribuyeron al banco con pocas semillas.  El incremento de HA y HP observado en los bancos 2000 y 2001, respecto del banco 1999, pudo estar relacionado con el incremento de las precipitaciones registradas en los años inmediatamente anteriores (1998=53,7 y 219,8; 1999= 71,04 y 515 y 2000=220 y 729 mm, para la primavera y el otoño, respectivamente).  La temperatura media de la primavera 2000 fue menor al valor registrado en 1999 para el mismo período (1999= 10,6 y 2000= 9,1 °C). El sinergismo entre precipitación y temperatura pudo contribuir al menor NTS encontrado en el banco 2001  Estos resultados indican que el banco de semillas postfuego, no está sólo influenciado por las condiciones microambientales del sitio, sino también por parámetros climáticos. Las precipitaciones y la temperatura influyen en la producción de semillas luego de un  incendio. Ambos factores actúan sinérgicamente, especialmente en el período de crecimiento de la vegetación y pueden ser utilizados como parámetros para estimar el tamaño del banco de semillas.