INVESTIGADORES
BRUNO paula Graciela
capítulos de libros
Título:
Georges Clemenceau en la Buenos Aires de 1910
Autor/es:
BRUNO, PAULA
Libro:
Visitas culturales en la Argentina, 1898-1936
Editorial:
Biblos
Referencias:
Año: 2014; p. 71 - 95
Resumen:
El artículo analiza la visita de Georges Clemenceau (1841-1929) a la Argentina en 1910. Se recuperan varias dimensiones de su visita en tanto evento cultural. Clemenceau llegó al puerto de Buenos Aires el 17 de julio de 1910. Frecuentemente se menciona su visita como un evento destacado del año del Centenario. Al llegar a la ciudad, el visitante, proveniente de una familia republicana y médico de profesión, había ocupado cargos destacados en la política francesa: alcalde de Montmartre, primero, diputado de la Asamblea Nacional, después, había abogado por la separación de la Iglesia y el Estado y se había opuesto a la expansión colonial de Francia. Su nombre resonó en el contexto del affaire Dreyfus, en tanto redactor de L´Aurore, se le atribuye la autoría del título del /J´accuse/ de Émile Zola. Ocupó los cargos de senador, ministro del interior y llegó a ser presidente del Consejo de Ministros. Al ejercer esta última responsabilidad, su vínculo con las tendencias socialistas se puso en duda y sus decisiones lo convirtieron en un personaje cuestionado por hechos como la represión de movilizaciones obreras y la reforma y endurecimiento del sistema de policía-. En este contexto, varias figuras anteriormente cercanas o afines a sus ideas políticas, como Jean Jaurès, rompieron relaciones con él. Puesta en duda su reputación por estos hechos y otros asuntos de política interna francesa, dimitió de su cargo en 1909 y se dedicó a dirigir dos periódicos, Le journal du Var y L´homme libre. Su carrera política se relanzaría recién con el estallido de la Primera Guerra Mundial.Los motivos del viaje de Clemenceau que aparecen en las fuentes son varios, aunque no se excluyen entre sí. Por un lado, se señala que un tanto hastiado de su vida en Francia, y contando con un espíritu constitutivamente curioso, manifestaba su voluntad de explorar América del Sur para descubrir su ´exotismo´. Se apunta también que necesitaba ingresos extraordinarios para costear una propiedad que había adquirido en Bernouville, en 1908. De este modo, al ver que Anatole France había conseguido un estipendio considerable en su visita a Buenos Aires, consideró la oferta de un empresario privado para hacer una gira de conferencias. Más allá de la jerarquía de estas motivaciones, Clemenceau no representó formalmente a Francia en los festejos oficiales del Centenario. Los delegados franceses que habían llegado a Buenos Aires eran profesores y autoridades de universidades o instituciones científicas francesas. También había sido invitado, como embajador extraordinario de Francia, Pierre Baudin. La visita de Clemenceau fue cubierta en los medios de prensa con interés, aunque el tratamiento de su estadía no fue diferente al de otros visitantes. Se destaca la aparición de una breve sección en El Diario publicada durante su estancia y titulada /La journée de M. Clemenceau/. Se multiplicó también la publicación de fragmentos de textos o discursos del estadista, proliferaron las caricaturas, y ganó un espacio la cobertura de las conferencias que dictó en el Teatro Odeón. En el capítulo se explora la visita en tres tiempos: el de las expectativas previas a la llegada, el de la visita en sí, y el de las repercusiones.