INVESTIGADORES
FERREYRA Diego Julian
congresos y reuniones científicas
Título:
Sobre el espíritu y la letra de las críticas de Deleuze a la Ciencia de la lógica
Autor/es:
FERREYRA, JULIAN
Lugar:
Valparaíso
Reunión:
Congreso; I Congreso Internacional Hegel; 2012
Institución organizadora:
Universidad Católica de Valparaíso
Resumen:
En medio del "anti-hegelianismo generalizado" de la década del 60 en Francia, Gilles Deleuze le dirige una serie de críticas a la ontología de Hegel que se podrían organizar en torno a los tres libros de la Ciencia de la lógica: 1) a la doctrina del ser: que el ser puro no es un comienzo más que a fuerza de remitir todos sus presupuestos al ser empírico, sensible y concreto ; 2) a la doctrina de la esencia: que la negatividad es el elemento fundamental que garantiza la circulación de lo idéntico; 3) a la doctrina del concepto: que el retorno (Rückkehr) es la repetición de lo idéntico a través del monocentrismo de los círculos de la dialéctica. Confrontaremos brevemente estas críticas con la letra del texto hegeliano, pero sólo para mostrar que el plano en el que alcanzan consistencia es el del espíritu de su filosofía. En efecto, de lo que se trata es de evaluar el vínculo entre los tres libros de la Ciencia de la lógica, y, en el límite, entre los tres momentos del sistema: lógica, naturaleza y espíritu. ¿Existe en la ontología hegeliana un centro, un fundamento, que garantice la identidad del movimiento? Deleuze considera que sí y de allí se desprenden todas las críticas: la Idea es el fundamento que se despliega necesariamente en la naturaleza (por ello el ser puro remite al ser empírico, por ello la negatividad no es más que un movimiento mecánico que garantiza la circulación de lo idéntico, y por ello el círculo del retorno tiene un único centro). Para refutar las críticas de Deleuze no alcanza entonces con mostrar su falta de correspondencia con la letra de Hegel; es necesario abordar sus consecuencias para el movimiento del espíritu: la relación entre los estadios no es la de un fundamento y su consecuencia (no es un juicio) si no un silogismo donde cada momento es a su vez, causa, consecuencia y medio. La Idea no termina nunca de cerrarse sobre sí misma y por ello su despliegue en el mundo no es un simple calco de esa eterna necesidad. La expresión de lo absoluto en la obra de Hegel no se correspondería así con el fin de la historia; debe, por el contrario, continuar expresándose infinitamente, creándose sin cesar al ritmo de la eterna auto-determinación de la Idea.