INVESTIGADORES
FERREYRA Diego Julian
congresos y reuniones científicas
Título:
Metafísica sin dogmatismo: el desafío del pensamiento trascendental
Autor/es:
FERREYRA, JULIAN
Lugar:
Buenos Aires
Reunión:
Congreso; Congreso Germano-Latinoamericano Hegel; 2014
Institución organizadora:
Filored
Resumen:
p { text-indent: 0.3cm; margin-bottom: 0.21cm; }p.cjk { font-size: 10pt; } Desde que Kant señalara el domino despótico de la metafísica bajo la administración de los dogmáticos, el destino de la metafísica y el dogmatismo han quedado tristemente anudados. La crítica de la metafísica para salvarnos del despotismo es el imperativo poskantiano. Si bien algunos pasajes parecen indicar que Hegel sostiene aquel nudo y que su pensamiento se inserta en el camino posmetafísico, intentaremos mostrar, desanudando aquel nudo kantiano, que el camino del pensamiento hegeliano es plenamente metafísico y al mismo tiempo anti-dogmático. Y que ese es el único camino por el cual el pensamiento filosófico enfrenta su desafío último: pensar la existencia sin traicionar ni al pensamiento ni a la existencia. Este camino es el que ha sido iniciado por Fichte al designar como el principal enemigo del verdadero pensamiento al dogmatismo. Leyendo con cuidado su caracterización, observamos que transforma radicalmente la concepción kantiana: lejos de identificarla con una metafísica que tomaría meras ?ideas? como la realidad misma, traslada la problemática a la cosa en sí. Así, tanto la metafísica tradicional como el criticismo caen en las redes del dogmatismo. Los primeros por creer que se puede conocer inmediatamente el ser en sí de las cosas, la segunda por creer que se lo puede declarar incognoscible. En ambos casos observamos una falencia común: la incapacidad de comprender la existencia a partir de su fundamento trascendental. Esta doble crítica es retomada por Hegel. En efecto, cuando critica a la antigua metafísica acusándola de ingenua y de creer que las determinaciones del pensamiento son inmediatamente las determinaciones de las cosas apunta al primer aspecto; y cuando se distancia del criticismo por imponer un dualismo en la realidad y una separación falsa entre pensamiento y existencia apunta al segundo aspecto. Parecería curioso entonces que Hegel acuse a Fichte precisamente de dogmático. No menos curioso que luego Hegel sea reiteradamente rechazado por su dogmatismo. Ocurre que el pensamiento roza el dogmatismo cuando intenta superar la simple empiria y alcanzar lo trascendental. En un pensamiento que pone al dogmatismo como su enemigo, antes de acusarlo de dogmatismo, es necesario comprender de qué manera ha intentado eludirlo, esto es, de qué forma se concibe la génesis de lo real.