INVESTIGADORES
FERREYRA Diego Julian
congresos y reuniones científicas
Título:
"Sobre la génesis del hombre y las formas sociales en el Anti-Edipo"
Autor/es:
FERREYRA, JULIAN
Lugar:
Rosario
Reunión:
Congreso; XIII Congreso Nacional de Filosofía; 2005
Institución organizadora:
AFRA
Resumen:
A pesar de la imagen que cierta recepción superficial popularizó, el Anti-Edipo, publicado por Gilles Deleuze y Félix Guattari en 1972, no es una colección de fórmulas pegadizas herederas de la ebullición del « mayo francés ».  Se trata, por el contrario, de una obra mayor de filosofía política donde se puede encontrar una sólida ontología que da cuenta de la formación social contemporánea a la luz de los procesos que le han dado lugar. En efecto, una comprensión adecuada de los conceptos de « máquinas deseantes » y « cuerpo sin órganos » permite explicar el funcionamiento del inconsciente como una sustancia espinosista cuya vida plena da lugar a las múltiples formas sociales y a los hombres que las habitan. Deleuze y Guattari proponen un inconsciente impersonal, un ello trascendental enfrentado a cualquier filosofía política que intente partir del yo y la conciencia. Sociedades primitivas territoriales, imperios despóticos bárbaros, capitalismo: tres formas sociales que no son variaciones de una misma estructura inmutable sino que cada una tiene un funcionamiento y una formación que les son propias. El Anti-Edipo nos da herramientas para comprender cómo el deseo puede investir cada una de estas formas (y, en esa medida « desear su propia represión ») pero también cómo puede desear el pasaje a una nueva forma, dar lugar a una morfogénesis social. Esta ponencia se propone mostrar cómo el hombre la sociedad modernas pueden ser explicados a partir de esos elementos últimos del inconsciente productivo, las máquinas deseantes. Se intentará exponer cómo estas formas sólo pueden ser explicadas a partir de una hylé maquínica, la masa indiferenciada compuesta  por una multiplicidad de máquinas que lo único que hacen es emitir un flujo y ser un corte respecto al flujo emitido por las otras.  En este contexto, el hombre aparece como el residuo de todas las formas sociales y lo común a todas. El hombre, engendrado junto a la primer forma de socius, el socius territorial primitivo, será la constante en todas las formas sociales sucesivas. Así como nunca hablaron del fin de la filosofía, Deleuze y Guattari tampoco hablan de la muerte del hombre. Sólo a la luz de este complejo desarrolo de la génesis de las formas sociales y el hombre, las formaciones sucesivas, los pasajes y los azares, será posible llevar a cabo un diagnóstico de la propuesta positiva del Anti-Edipo, donde el cuerpo sin órganos como socius informe pueda reemplazar a las formas sociales y los hombres entren en un nuevo régimen, en nuevas conexiones, tal vez impensables