INVESTIGADORES
ALVAREZ maria fernanda
congresos y reuniones científicas
Título:
PALEOSUELOS SEPULTADOS POR CENIZAS VOLCÁNICAS DE LA REGION OESTE DE TUCUMÁN, ARGENTINA
Autor/es:
OSTERRIETH, M .; ALVAREZ, M.F.; FERNANDEZ-TURIEL, J.L.; PEREZ-TORRADO, F.J.
Lugar:
Córdoba
Reunión:
Congreso; XIX Congreso Geológico Argentino; 2014
Institución organizadora:
Asociación Geológica Argentina
Resumen:
Este trabajo se realiza en el marco del proyecto: Impactos medioambientales de erupciones Cuaternarias en los Andes Centrales: modelado para la prevención de los efectos de futuras erupciones (QUECA). Son numerosas las erupciones volcánicas ocurridas durante el Cuaternario en los Andes y, particularmente, en el sector del norte de Argentina y Chile con generación de diversos impactos ambientales en la región. El Proyecto QUECA se focaliza en el análisis del impacto ambiental de las erupciones cuaternarias de los Andes centrales, prestando especial atención a las holocenas, con el objeto de modelar la predicción y prevención de los efectos de futuras erupciones en el medio ambiente. La búsqueda de antecedentes de estas erupciones son numerosas y han sido estudiadas desde distintas áreas temáticas. Los suelos que quedan sepultados por capas de cenizas son buenos indicadores de las condiciones ambientales existentes hasta el momento de la erupción. La vegetación asociada a esos suelos evidencia las condiciones climáticos y ambientales que la sustenta. Los silicofitotlios son biomineralizaciones de sílice amorfa hidratada, producidas por un amplio número de comunidades vegetales, en todo el mundo (Osterrieth 2004). Por lo cual se constituyen en buenos indicadores de la relación planta- suelo-ambiente. El objetivo del trabajo fue analizar el contenido de silicofitolitos en suelos y paleosuelos presentes en una zona cercana a Tafí del Valle, Tucumán, y a partir de estos bioindicadores estimar la intensidad y tipo de procesos pedogenéticos que los generaron y, en el caso de los paleosuelos, los procesos postpedogéneticos acaecidos. El paleosuelo estudiado se halla cubierto por un depósito de ceniza volcánica del Holoceno medio procedente del Complejo Volcánico de Cerro Blanco en el Sur de la Puna (Fernández-Turiel et al., 2013). Se trabajó con muestras integradas (12 X 1), tamizadas y cuarteadas de los suelos actuales ubicados en la zona de estudio y de los suelos sepultados por cenizas volcánicas, en los sectores más conspícuos. Se realizó la determinación de carbono orgánico edáfico (COS) mediante la técnica de Walkey y Black (1969) y el estudio de silicofitolitos como parte de la mineralogía total de las muestras de las mismas, siguiendo técnicas de rutina (Alvarez et al.; 2006). La cuantificación de los silicofitolitos se llevó a cabo con microscopio petrográfico, su descripción y clasificación se siguiendo el ICPN (International Code for Phytolithv Nomenclature 1.0) (Madella et al., 2005), mediante un conteo de 500 a 700 granos por muestra. Los suelos actuales se caracterizan como Entisoles, con una cubierta vegetal no mayor al 7%, compuesta por un matorral xerófito y muy escasas gramíneas, presentando un contenido en carbono extremadamente bajo. La granulometría es psefitica-arenosa gruesa, con muy escasos a nulos contenidos de pelitas. Los paleosuelos, con textura predominantemente arenosa media, poseen mayor cantidad de pelitas, en particular limos, respecto al suelo actual; los contenidos de COS en estos paleosuelos oscilan entre 7 y 8 mg C g-1. Los silicofitolitos en los suelos actuales alcanzan un 3 a 4% de la mineralogía total de la muestra, dominando los morfotipos Elongados, Rondels y, en escasa proporción, algunos Bilobados, Saddle y Buliformes. En general todos presentan una buena preservación (Figura 1a-e). Estas morfologías son indicadoras de gramíneas en general, y se corresponde con las escasa vegetaciónobservada, de arbustos xerófitos y muy escasas gramíneas. Los contenidos en silicofitolitos presentes en el suelo sepultado son sustancialmente superiores a los hallados en los suelos actuales con valores del 30% respecto de la mineralogía total del mismo. Los morfotipos dominantes (Figura 1f-i), son Elongados con variados tamaños con bordes crenados a lisos; Bilobados de variados tamaños y extremos lisos, convexos y cóncavos (Figura 1h), indicadores de gramíneas panicoides tipo C3 y C4 y poáceas (C3). Se hallaron también morfotipos Saddles indicadores de comunidades de rutas metabólicas C4. También son comunes los Bulliformes de tamaños grandes y medianos, típicos de gramíneas; y células típicas de tejido conductor (Figura 1j). Se destaca una cantidad relevante de silicofitolitos articulados mayoritariamente elongados lisos con morfotipos Aguzados de espinas asociadas, característicos de epidermis de gramíneas (Figura 1 k,i). Estos silicofitolitos articulados en general, se asocian a condiciones ambientales de alta estabilidad, sectores topográficamente planos, y/o procesos de sepultamientos rápidos (Osterrieth,2004; Osterrieth et al.,2009) como sucedió en este caso de estudio. En ambos suelos estudiados los vidrios volcánicos son abundantes (Figura.1). Por lo expuesto, la presencia cuali-cuantitativa de silicofitolitos en los suelos actuales y sepultados analizados indicaría condiciones de mayor estabilidad ambiental y procesos pedogenéticos más conspícuos, que sostuvieron una importante cubierta de gramíneas, durante un lapso temporal considerable, hasta el momento del sepultamiento por la erupción del Holoceno medio del Complejo Volcánico de Cerro Blanco, y que se diferencian claramente de los actuales procesos pedogenéticos incipientes