La eclosión de Liolaemus elongatus: mucho diente para tan poca cáscara?

CROCCO, M.C., N.R. IBARGUENGOYTIA, Y V.E. CUSSAC.

Corrientes

Congreso; VII Congreso Argentino de Herpetología; 2006

La especia saxícola Liolaemus elongatus se considera vivípara de acuerdo a la definición de Blackburn (Copeia 1994:925-935). Posee placentas corioalantoidea de tipo I, onfaloplacenta y onfaloalantoidea, que le permiten transcurrir todo el desarrollo en el útero materno (Crocco 2001 tesina). El embrión se halla envuelto en una cáscara que, como en otros lagartos vivíparos, es delgada, transparente y sin depósito de calcio. Esta cáscara, en aposición al útero, admite el intercambio materno-fetal requerido en la función placentaria. Se presentan aquí las características de la cáscara de L. elongatus y se registra por primera vez la presencia de un diente del huevo para esta especie. Se observaron los nacimientos de 6 ejemplares de L. elongatus en cautiverio. Se examinó y fotografió bajo microscopio estereoscópico la región máxilo-facial. Se realizaron 28 preparaciones histológicas de 4 huevos embrionados de diferentes hembras. Ellas fueron coloreadas con Tricrómico de Masson y observadas bajo microscopio óptico.  La estructura de la cáscara L. elongatus es fibrosa y tiene un grosor medio de 10,9 ± 4,5 µm. Se observó que, entre 15 minutos y varias horas tras la postura, el embrión de L. elongatus se mueve dentro del huevo y rompe la cáscara. Para esto cuenta con un diente del huevo y se vale también del movimiento de las patas. Inmediatamente el recién nacido comienza a desplazarse llevando un pequeño saco de vitelo, posiblemente restos de la masa vitelina aislada presente en esta especie, que se deshidrata y se pierde al poco tiempo (Crocco, 2001). El diente del huevo, típico de los ovíparos, y una cáscara delgada y casi translucida, típica de vivíparos, son evidencia de una inesperada combinación entre las características que definen a uno y otro modo.