POLÍTICAS CULTURALES, AGENTES Y PATRIMONIOS

LACARRIEU, MONICA

Montevideo

Congreso; Reunion de Antropología del Mercosur; 2015

Universidad de la República

Muchos años han transcurrido desde la emergencia de la noción de patrimonio inmaterial y desde la sanción de la Convención para la Salvaguardia del PCI, UNESCO (2003). Entre los ´90 y los primeros años posteriores a la convención, muchos de nosotros, antropólogos en su mayoría, estábamos seducidos por la visibilización y el reconocimiento que se otorgaba a grupos, antes relegados del campo patrimonial, mediante la activación de expresiones culturales antes vistas como populares y tradicionales y de menor valor que otros patrimonios. En esa primera etapa, el PCI se vio como un ámbito de doble reconocimiento: por un lado, el relativo a los grupos ?carentes? de cultura de trascendencia, por el otro, el que otorgó protagonismo a los antropólogos como expertos del patrimonio y a la antropología como instrumento de validación del mismo. Fueron años, también, de debate sobre la noción, su definición, el tipo de manifestaciones que serían objeto de legitimación, las comunidades que serían visibilizadas, los instrumentos de relevamiento y catalogación que deberían usarse, si continuaríamos con la idea de preservación o la novedosa salvaguardia. Estas cuestiones contribuyeron en nuevos parcelamientos atomizados, autonomizando el PCI, no solo de los otros patrimonios, sino incluso descontextualizándolo de las políticas culturales. Si bien, de a poco se introdujo la relevancia que debía darse a la participación comunitaria, fueron escasos los debates acerca de la ?metáfora del diálogo? que Francisco Cruces señalara como asunto clave en este nuevo campo. Partiendo de las políticas de la interculturalidad, de las políticas asociadas a la decolonialidad y de las políticas de los ?bienes comunes?, me interesa reflexionar críticamente sobre la práctica antropológica en el contexto de los PCI. Particularmente focalizando en el antropólogo interpelado por los sujetos y colectivos ?intervenidos? desde los espacios de activación de los PCI, poniendo en juego la disputa construida en torno de que los antropólogos construyen relatos errados sobre los otros, y que los otros son los autores de sus propios relatos, y que se trata de un espacio de alteridad en clave de contienda ?retomando a Segato-. Estas reflexiones serán realizadas a partir de experiencias locales desarrolladas en el terreno de la institucionalidad estatal, así como en el espacio de Unesco: particularmente inventarios de milongas, cafés y filete porteño.