INVESTIGADORES
CASTAGNARO Atilio Pedro
capítulos de libros
Título:
Aproximación biotecnológica integrada para un manejo sustentable del estrés biótico en frutilla.
Autor/es:
CASTAGNARO, A. P.; SALAZAR, S. M.; ZEMBO, J. C.; DÍAZ RICCI, J. C.
Libro:
Biotecnología y Mejoramiento Vegetal.
Editorial:
INTA-DDIB
Referencias:
Lugar: Buenos Aires; Año: 2004; p. 367 - 372
Resumen:
La frutilla cultivada (Fragaria x ananassa: 2n=8x=56) es un poliploide con 56 cromosomas resultante de la hibridación interespecífica entre dos especies de frutillas silvestres, también octoploides. Una de estas frutillas es originaria del sur (F. chiloensis: 2n=8x=56) y la otra del norte de América (F. virginiana: 2n=8x=56). La x en el nombre científico hace referencia a su condición de híbrido. Se trata de un importante fruto que se consume en fresco o industrializado y que es muy apreciado en prácticamente todo el mundo. Su cultivo involucra dos actividades agronómicas bien diferenciadas: la producción de frutas y la viverística, las cuales generan una gran demanda de mano de obra (alrededor de 500 jornales /Ha /año), por lo cual en muchos países es considerado también como un cultivo social.   Si bien se realiza mejoramiento genético en distintos lugares de Asia, Europa y Norte América, el mercado de variedades está dominado por empresas estadounidenses que imponen sus cultivares en base a fuertes presiones comerciales ejercidas sobre los agricultores viveristas de los principales países productores y consumidores. En Argentina, a partir de 1996 comenzó a funcionar, en forma organizada, el Programa Nacional de Mejoramiento Genético de la Frutilla (Pro\Frutilla) a través de una iniciativa interinstitucional (sectores público y privado) e interdisciplinaria (combina el mejoramiento genético convencional con los métodos surgidos de la biotecnología molecular), que en 1999 representó a nuestro país en la exposición “Flanders Technology International-Technoland”, en Gante, Bélgica.   El objetivo general del Pro\Frutilla es obtener cultivares argentinos adaptados a por lo menos dos agroecosistemas o ambientes de selección (el subtropical de Lules en Tucumán y el templado del cinturón hortícola del Gran La Plata, en Buenos Aires), con resistencia incrementada a estrés de origen biótico que permita evolucionar hacia una agronomía menos reñida con la salud humana y ambiental (principalmente sin bromuro de metilo) y para que empresas viveristas locales puedan aprovechar las ventajas comparativas de exportación de plantines de genética nacional en contraestación con los países del hemisferio norte.