CIECS   20730
CENTRO DE INVESTIGACIONES Y ESTUDIOS SOBRE CULTURA Y SOCIEDAD
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
La imbricación entre acción colectiva y políticas públicas de base comunitaria: un análisis desde la perspectiva de actores colectivos e institucionales
Autor/es:
GUTIÉRREZ, MARIANA; SORRIBAS, PATRICIA
Lugar:
Buenos Aires
Reunión:
Conferencia; VIII Conferencia Latinoamericana y Caribeña de Ciencias Sociales y el I Foro Mundial del Pensamiento Crítico; 2018
Institución organizadora:
Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales
Resumen:
Según el análisis de las instancias de definición política y a juzgar por las acciones sustantivas llevadas a cabo por la (ex) Secretaría de Cultura de la Nación, entre los años 1983 y 1999, en la Argentina ha primado el modelo de democratización de la cultura. (Mendes Calado,2015). Recuperando las experiencias argentinas de finales de siglo, Wortman (2009) señala la existencia de un recorrido que inicialmente da cuenta de la emergencia y desarrollo de prácticas e imaginarios de cuño neoliberal, luego reorientado hacia la emergencia de nuevas experiencias en la contemporaneidad, asociados en términos generales al corte que se identifica en la crisis de 2001 en Argentina. En este sentido, el período neoliberal, se caracterizó por el debilitamiento de la presencia del Estado en el campo económico, social y cultural, la mercantilización de la ?vida social? y la deslegitimación de los espacios públicos, entre otros. (Wortman,2009). Este fenómeno, identificable a escala latinoamericana, sostenía además un imaginario donde ?lo político? y ?lo cultural? se presentaban escindidos. Vale decir al respecto que la creencia dominante consistía en que ?las sociedades tenían problemas más apremiantes que los culturales? y a su vez, ?artistas e intelectuales vivían lo político como un terreno ajeno? (Infantino, 2012:17).En contraste, a finales del siglo XX cuando se evidenció una crisis del paradigma neoliberal en América del Sur, cobran relevancia las políticas públicas en torno a ?lo cultural? considerándose desde los Estados y otras instituciones, que la cultura es un ?recurso? valioso para alcanzar soluciones ante problemas de desarrollo (Yúdice, 2002; Infantino, 2012).En varios países de América Latina, a partir del denominado ?giro a la izquierda? (Arditi, 2009), se comienzan a producir cambios muy importantes en las políticas públicas respecto de las ejecutadas en la década de los noventa. Esa transformación estaba centrada en otorgarle un papel preponderante al Estado, proponiendo una mejor distribución de la riqueza y al mismo tiempo una mayor inclusión social. Tales modelos de ?desarrollo con inclusión? además pretendían ampliar el espectro de derechos civiles, sociales, políticos y culturales de la población y priorizar el respeto a la diversidad (Fuentes Firmani, 2016)Es en ese contexto que surge ?Cultura Viva Comunitaria?, un movimiento continental que se autodefine como ?un conjunto amplio de experiencias de arte, cultura y comunicación popular de toda América Latina que [comparten] un sueño común, expresado emblemáticamente, en la experiencia de desarrollo cultural impulsada en los últimos años en Brasil como país y en Medellín como ciudad? (CVC, 2015). Esta plataforma le da a las experiencias locales de cultura y arte un rasgo diferencial, al ser definidas como ?experiencias ancladas en el territorio local o regional, y al mismo tiempo orientadas a la acción nacional y continental? (CVC, 2015). A partir de entonces, la red comenzó a tejerse en torno a congresos, festivales y jornadas de intercambio involucrando en la actualidad a 12 redes, 80 organizaciones y 21 países.Como afirma CVC, el nombre del movimiento continental está inspirado en una política cultural que nace en el 2004 en Brasil, el Programa Nacional de Cultura, Educación y Ciudadanía Cultura Viva (PCV).En 2014, la diputada Jandira Feghali (PCdoB/ RJ) junto a los beneficiarios de ese programa (denominados Puntos de Cultura), lograron que se sancione la ley 13018 ?Cultura Viva? (Ibercultura Viva, 2016)Por otro lado, en Argentina, producto del esfuerzo de la red nacional ?Pueblo hace Cultura? (red miembro del movimiento CVC), se formula un proyecto de Ley en Apoyo a la Cultura Autogestiva Comunitaria e Independiente que comienza a tener tratamiento en la Cámara de Diputados en el año 2012. Sin embargo, en 2011 la Secretaría de Cultura de la Nación lanzó un programa homónimo al de Brasil, por el cual al día de hoy más de 700 organizaciones han resultado beneficiarias del mismo y conforman la Red de Puntos de Cultura Nacional (Ministerio de Cultura de la Nación, 2017).Los procesos experimentados por Puntos de Cultura Argentina y el Movimiento Cultura Viva Comunitaria invitan a plantear una serie de interrogantes que abordamos en las próximas líneas. Específicamente, en el marco de nuestra investigación nos propusimos conocer los marcos interpretativos en torno a la definición e implementación de una política pública nacional para la cultura ?comunitaria?, desde la perspectiva de actores colectivos de Córdoba Capital y Sierras Chicas y actores institucionales nacionales. A partir de un corpus compuesto por documentos, observaciones participantes en encuentros de CVC y Puntos de Cultura y de 12 entrevistas realizadas entre 2016 y 2018, con participantes del movimiento, beneficiarios de Puntos de Cultura y funcionarios del Ministerio de Cultura de la Nación, analizamos los marcos de la acción colectiva y los marcos interpretativos de la política pública en cuestión. Por ende, se abordará no solo la construcción interactiva y negociada de los esquemas interpretativos del Movimiento CVC en Córdoba, sino que también se propone abordar, desde la perspectiva de sus actores, el enmarcamiento de la política o policy framing (Verloo, 2005) que tuvo lugar en Argentina tanto en el Poder Legislativo Nacional (en la formulación de los Proyectos de Ley en materia de Cultura Comunitaria), como en el Poder Ejecutivo a partir del Programa Nacional ?Puntos de Cultura?.A partir de los hallazgos, se puede esbozar una matriz compuesta por actores institucionales y actores sociales colectivos que a la vez pueden encontrarse más vinculados con el Programa Puntos de Cultura o con el Movimiento Cultura Viva Comunitaria. Esto se deriva de la concomitancia del proceso de movilización por la formulación de una ley que transforme a la Cultura Comunitaria en política de Estado (lo que involucró consecuentemente a miembros del Poder Legislativo) con el nacimiento del Programa Puntos de Cultura de la entonces Secretaría de Cultura de la Nación.La estrategia del análisis de marcos nos permitió abordar las continuidades (resonancias) y rupturas (disonancias) no solo entre la acción colectiva y las políticas culturales nacionales a nivel local, sino también en diálogo con los rasgos que adopta el movimiento y las acciones estatales en otros países de América Latina.De manera reciente, los estudios de movimientos sociales y democracia han incorporado una serie de consideraciones en torno a la difusión internacional para comprender fenómenos sociales y políticos con una mayor complejidad (De Oliveira, 2013). Como consecuencia, se incorporarán reflexiones en torno a la implicancia de la agencia individual (de algunas autoridades, funcionarios públicos, líderes de movimientos) y la agencia institucional (de organismos internacionales y programas de cooperación transnacional) para la difusión internacional de las políticas públicas de cultura comunitaria. Cabe señalar a la luz de nuestros hallazgos que ante el actual recrudecimiento de las políticas neoliberales tanto en Argentina, como en Brasil y otros países de la región, existen algunas estrategias que son adoptadas para la persistencia de las experiencias de cultura comunitaria. Tienen que ver con en el fortalecimiento de espacios de encuentro entre miembros del movimiento CVC, beneficiarios de Puntos de Cultura y funcionarios estatales de niveles provinciales y municipales, a los fines de incentivar políticas culturales de base comunitaria de alcance local. Sin embargo, no solo esa escala cobra relevancia, sino también la dimensión internacional, dado que en el desarrollo de dichos espacios de encuentro y construcción de redes cobra un rol fundamental el organismo transnacional denominado Ibercultura Viva que aporta recursos económicos y de organización.Sobre dicha clave de lectura, abordamos las derivas y desafíos actuales de las políticas culturales analizadas, las que luego de ser concebidas durante un ?ciclo político continental? (Santini:2017) que favoreció la participación de la sociedad civil y la ampliación de derechos sociales hoy se encuentran atravesando una serie de crisis que distan enormemente del ambiente que propició su surgimiento.