CIECS   20730
CENTRO DE INVESTIGACIONES Y ESTUDIOS SOBRE CULTURA Y SOCIEDAD
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Crisis, conflictos, avances y desafíos en Suramérica
Autor/es:
SILVINA BRUSSINO
Lugar:
Bogotá
Reunión:
Congreso; 2° Encuentro Suramericano de Psicología Política; 2017
Institución organizadora:
Universidad Piloto de Colombia
Resumen:
Nos encontramos en el inicio de una nueva edición del Congreso Ibero Latinoamericano de Psicología Política y el Encuentro de grupos y equipos de investigación de la AILPP. Sin lugar a dudas, este se ha tornado en un espacio para el encuentro entre los colegas de la región, para el intercambio de ideas y experiencias que, en esta ocasión, se va a centrar en el análisis y la discusión de las acciones y los desafíos contemporáneos en torno al territorio, las fronteras y la transformación social. Es mi intención en esta apertura compartir con ustedes algunas reflexiones, que no pretenden ser exhaustivas, pero que en este tiempo de trabajo en torno a la conformación de la Asociación, hemos recogido como algunos de los desafíos que la Psicología Política tiene por delante.Hasta hoy, la mayoría de quienes han reflexionado en torno a la evolución de la Psicología Política en la región, afirman que se encuentra en un estado inicial de desarrollo. No obstante, los recientes avances vinculados con la fundación de la Red y la Asociación Ibero-latinoamericana de Psicología Política, y las acciones derivadas de ello (Congresos internacionales, monográficos en conjunto, investigaciones articuladas, etc.) van mostrando una dinámica tendiente al reconocimiento, formalización e institucionalización de nuestro campo de trabajo, y un cuerpo de investigadoras/es que lenta y progresivamente van logrando convertirse en un colectivo con identidad propia. Esto nos posiciona ante diversos desafíos, algunos vinculados con la necesidad de seguir avanzando en la línea iniciada en Medellín en 2011 y continuada con la fundación de la AILPP en Córdoba (Argentina) en el mismo año, y otras asociadas con la responsabilidad que ya hemos adquirido como campo disciplinar al ser progresivamente reconocidos. Quiero decir con esto que los desafíos son dobles: desafíos para continuar avanzando en la formalización, reconocimiento e institucionalización de la Psicología Política, pero también desafíos vinculados con la responsabilidad que recae sobre nosotros en tanto colectivo al ser más reconocidos que lo que éramos tres años atrás. Esta situación, se articula a una coyuntura socio-política particular. La coyuntura de nuestros países, signada por enormes desigualdades y por profundos cambios sociopolíticos en curso, exige una labor mancomunada por parte de los académicos y académicas a los fines de colaborar en la construcción de conocimientos relevantes y útiles para nuestros pueblos, en el marco de procesos de producción que respeten altos estándares de calidad, adecuación a normas éticas y compromiso social.Asimismo, es preciso señalar, insistir y reclamar modificaciones en torno a las limitaciones que todavía tenemos quienes pretendemos trabajar desde esta área: escaso financiamiento, ausencia de políticas académicas que incluyan a la Psicología Política en las currículas de formación de los psicólogos y psicólogas ibero-latinoamericanos, ausencia de reconocimiento de la disciplina como un área del ejercicio de la profesión en las normativas legales concernientes a las incumbencias del quehacer psicológico, desarticulación entre profesionales que trabajamos en el área, fragmentación y atomización de nuestras producciones, entre otros.