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Córdoba se presenta como una de las ciudadescoloniales latinoamericanas en la cual los blancos eran percibidos como los másrígidos y defensores de sus privilegios de clase. A las restricciones impuestaspor la legislación española a los matrimonios entre personas de distinto origenétnico y social se sumaría la desproporción numérica de sexos en el mercadomatrimonial. Los índices elevados de nacimientos fuera de matrimonios ?mayoraún entre las castas- revelan hasta qué punto correspondió el impulso vital dela población a las limitaciones señaladas. Es que los impedimentos eran de tiposocial más que étnica., ya que la conducta sexual de la población reflejarelaciones estrechas y frecuentes entre blancos y las denominadas castas. Sibien éstas no podían acceder a un ascenso en la sociedad estratificada deentonces, dado su origen ?espúreo?, asumían una actitud más abierta en susrelaciones, fueron o no legítimas. La alta ilegitimidad resultante: hijosnaturales producto de amancebamientos la mayoría de ellos, era una costumbre desiglos en la sociedad americana.En algunas regiones, los altos niveles de ilegitimidad de las poblacionesse relacionaban a la herencia de la esclavitud, la pobreza y el pasadoafricano. Una propensión a la ?vida fácil? y una cierta desconsideración hacialas normas legales y morales eran igualmente citados como causas. Por otrolado, la literatura transmite la noción que en la campaña, el relajamientomoral se agudizaba, estimulado por las grandes distancias y falta de control delas autoridades civiles y religiosasEstimamos que en la población cordobesa de lossiglos XVII, XVIII y hasta bien entrado el XIX, las relaciones extranconyugales? y los hijos habidos en ellas- fueron una forma de integración entre losdiversos grupos étnicos al margen de la pautas impuestas por una sociedadestamental