La urbanidad y sus palabras: dinámicas expresivas de los patrones de circulación

MARIA BELÉN ESPOZ

Coimbra

Simposio; II SIMPOSIO EDISO, ?DISCURSOS Y SOCIEDADES EN MOVIMIENTO; 2015

Universidad de Coimbra

En la década del 20' y el 30' del siglo pasado, algunos autores reflexionaban fuertemente en la cuestión de "la condición humana" (Benjamin, Weil; Arendt; etc.) en un contexto donde surgía un nuevo tipo de experiencia que implicaba para una generación completa encontrarse con que "todo menos las nubes" había cambiado. La pista de los situacionistas en los 50', 60' nos señalaba que, al menos desde la postguerra, la batalla pasaba a ser dominio en la vida cotidiana y era precisamente nuestra sensibilidad el ?botín de guerra?. Raoul Vaneigem en su Tratado pautaba algunas líneas donde la liberación del secuestro experiencial al que había sido sometido el lenguaje, era clave para la pretensión de radicalizar las subjetividades. Valentín Voloshinov pero también Mijaíl Bajtín comprendiendo las dinámicas estructurales de conformación de las vivencias/experiencias, desarrollaron una línea en similar dirección articulando praxis-acción-pensamiento como el tramado que sostiene al ser y la potencialidad de su expresividad para la transformación social.En el presente trabajo pretendemos reflexionar sobre las expresividades de una forma de habitar el espacio que no solo se modifica continuamente (ya no entre generación y generación, sino de forma variada en la unidad de una vida en particular) sino que se configura a partir de ella: la urbanidad. Para ello tomaremos algunas referencias del caso de la ciudad Córdoba, Argentina y sus transformaciones en los últimos 20 años.Las formas de metabolizar los cambios de una ciudad en su transformación continua desde las capacidades perceptivas, sensitivas, emotivas y cognitivas de las vivencias individuales y colectivas ?resultando una violenta adecuación a esa velocidad propuesta siempre en términos clasistas-, encuentra en la conformación de patrones de circulación la cinta de moebio que estructura las sensibilidades muchas veces desancladas de las deseabilidades. Este quiebre entre sentidos y deseos es fundamental para comprender la complejidad de las formas de expresividad en formaciones sociales como las nuestras, y el lugar del ?espectáculo? como forma de relación social. En ese sentido, los patrones expresan los caminos que guían a los cuerpos en la vida urbana en la actualidad, configurando vivencialidades diferentes según el patrón en el que se circule y la velocidad de desplazamiento (entornos clasistas), por lo tanto la potencialidad de la acción -y su contrario, la ataxia-. Pretendemos desarrollar algunas "conjeturas" sobre las formas expresivas de la vida urbana contemporánea en relación a las decisiones urbanísticas que moldean su maleabilidad día a día, y el lugar de fijación ofrecido por la operatoria de los medios de comunicación (tradicionales y los llamados ?nuevos?) y su función ideológica. Es en el "entre" estos dos dispositivos de colonización cotidiana (formas jerárquicas del poder combinadas con formas de servidumbre voluntaria, al decir de Vaneigem) donde se puede reubicar la vieja discusión sobre los sentidos del quebradizo cuerpo humano. Cuerpo como punto de inflexión por el que atraviesa diversos mecanismos de regulación de la acción y por ende de las conflictividades. El lenguaje sigue siendo en este sentido, la arena de la lucha de clases.