CIECS   20730
CENTRO DE INVESTIGACIONES Y ESTUDIOS SOBRE CULTURA Y SOCIEDAD
Unidad Ejecutora - UE
capítulos de libros
Título:
Primero hay que saber sufrir… !!!Hacia una sociología de la “espera” como mecanismo de soportabilidad social
Autor/es:
SCRIBANO, ADRIÁN
Libro:
Estudio del Cuerpo y las Emociones en y desde Latinoamérica
Editorial:
CUSH Universidad de Guadalajara
Referencias:
Lugar: Guadalajara; Año: 2009;
Resumen:
Un invierno cualquiera en una capital importante de Latinoamérica las “gentes” se aprestan para entrar al subterráneo, una imagen se repite: hay que esperar. Ese mismo día, a la misma hora, millones de sujetos esperan el colectivo, el bus, o como se lo designe, pero la gestualidad y la postura es la misma: hay que esperar. Atrás (en el barrio donde el frío estruja pies y pechos) quedaron las familias de los que hacen fila, esperando también…que llegue la anhelada noticia de que vinieron los que traen la comida para el barrio, que llegaron los médicos que atienden a los niños con tos, que llegaron los que “inscriben” para el subsidio estatal. Miles de latinoamericanos esa misma mañana se disponen a pagar los impuesto, el gas, la electricidad y comparten en tono de unidad regional desde el espanto la actitud de esperar que los atiendan. Eternas colas para el transporte público, fenomenales colas para hacer un tramite, monumentales esperas cotidianas, vivir apretados…corriendo…y “a mil”, hacen de la espera una actividad cívica y de la paciencia una virtud política . Todos estos compatriotas y los que leemos este relato compartimos la espera como sociabilidad y vivencialidad. Todos también, de un modo u otro, percibimos la vida y le imputamos sentido desde los colores que usamos analógicamente para describirla. Una vida que entre el esperar y la paciencia se vuelve negra, se siente rosa o se repite como gris. Para los ciudadanos de las democracias neo-coloniales esperar es una actividad cívica y la paciencia una virtud. Antes y después de los procesos eleccionarios el imperativo democrático es “hacer ante sala” para ejercer los derechos. Por esta vía, espera, paciencia y derechos ciudadanos son los componentes de los paisajes de la pax imperial cotidiana. ¡Hay que esperar que los militares no tengan poder!; hay que aguantar hasta que frenemos la inflación; ya viene la revolución productiva; hay que pagar la deuda externa para que no nos bloquen; no hay que pelearse…estamos en el purgatorio…todas frases que hacen de la paciencia una virtud política. En el marco de estas situacionalidades se configuran en –y a través de- las emociones y los cuerpos la espera y la paciencias como sociabilidades adecuadas. La tensión entre autonomía y heteronomía que absorbe la paciencia la coloca entre los principales mecanismos de soportabilidad social. El presente trabajo pretende indagar y abrir algunos interrogantes sobre el aludido proceso. La estrategia argumentativa seleccionada ha sido la siguiente: 1) se presentan – sumariamente- una aproximación conceptual de las relaciones entre mecanismos de soportabilidad social, emociones y políticas corporales; 2) se exponen las conexiones entre sufrimiento, paciencia y sensaciones a través de la “crónica de un aprendizaje” y sus lecciones haciendo evidentes a la espera como actividad cívica y la paciencia una virtud política; 3) se muestra a la espera y la paciencia como mecanismos de soportabilidad social y, 4) se finaliza con una breve reflexión respecto a re-acciones y formas de resistencia. El trabajo ha sido pensado como un ejercicio de auto-etnografía, como una lectura transversal a declaraciones de los habitantes del mundo del no y como un ejercicio de interpretación de materiales de aparecidos en Internet. Dado que dicha articulación informativa debe ser objeto de fundamentación –y por que no de autocritica- se brindan aquí algunas pistas bibliográficas que permitan al lector intuir cual seria el camino para sostener y garantizar la estrategia seguida si el espacio disponible así lo permitiese. De todas maneras, hay dos motivos epistémicos (ya comunes en las ciencias sociales) que se pueden brindar como respaldo argumentativo: a)todo científico social depende para construir sus afirmaciones de un proceso –necesario e ineludible- de “doble hermenéutica”; y b) la clave para sostener y fundar afirmaciones es el alcance que se quiera dar a las mismas. Se sostiene la necesidad de profundizar (empírica y teóricamente) el estudio de la paciencia como un aporte a la reconstrucción de una política de las emociones en el contexto de las democracias neo-coloniales.