Democracia liberal y seguridad nacional en el gobierno estadounidense: continuidades y rupturas

SILVINA MARÍA ROMANO

Estados Unidos: nuevas condiciones de legitimación

Siglo XXI-CLACSO-ASDI

Lugar: México DF. ; Año: 2010; p. 360 - 384

La política “antiterrorista” de la administración de George W. Bush estableció una relación entre democracia y seguridad que implica la limitación de la primera como condición necesaria para el logro de las metas de la segunda. Esta estrategia condujo al recorte –por medios legales– de las libertades básicas promovidas por la democracia liberal, con el objetivo de “garantizar” la seguridad de los ciudadanos estadounidenses. De esta manera, lo que se inició con las operaciones encubiertas de la Agencia Nacional de Inteligencia (CIA) y del Departamento de Estado en otros países a comienzos de la guerra fría y que estaba completamente prohibido de ser practicado en territorio estadounidense (con excepción del Macarthismo), hoy amenaza las libertades civiles de los mismos norteamericanos, las cuales –de la manera en que lo presenta el discurso oficial– constituyen uno de los pilares del “modo de vida americano”, a la vez que resultan ser las mismas “libertades” que este gobierno lucha por extender hacia el resto del mundo. En consecuencia, proponemos analizar la relación entre democracia y seguridad nacional en el contexto de la actual política antiterrorista, aspecto que será abordado desde la perspectiva de las elites y teniendo en cuenta las continuidades y rupturas con el discurso del gobierno estadounidenses durante los primeros años de la guerra fría. Nuestro punto de partida para el análisis es que la agresiva política externa e interna del gobierno estadounidense se basa en la presencia de un polo militar-industrial en auge, estrechamente ligado al expansionismo del libre mercado y la democracia liberal como dimensiones clave en la reproducción del capitalismo.