ISES   20394
INSTITUTO SUPERIOR DE ESTUDIOS SOCIALES
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Prospección arqueológica en el sector pedemontano del Parque Nacional Campo de Los Alisos
Autor/es:
MIGUEZ, GABRIEL; GRAMAJO BÜHLER, MATÍAS Y PABLO OJEDA
Lugar:
Santiago del Estero
Reunión:
Otro; 9° Encuentro de Jóvenes Investigadores; 2009
Institución organizadora:
Colegio de Santiago
Resumen:
Durante el mes de Noviembre de 2007 se efectuó una prospección arqueológica en la porción pedemontana del Parque Nacional Campo de Los Alisos (PNCLA), Dpto. Chicligasta, Provincia de Tucumán. El área prospectada se halla ubicada en la parte oriental del parque, entre los 850 m s.n.m. (Puesto Santa Rosa) y los 1.100 m s.n.m. (Puesto Los Chorizos). Los ríos Las Pavas y Jaya constituyen los límites norte y sur de la mencionada zona trabajada. En el Dpto. de Chicligasta, existe una zona con características geográficas propias, fundamentalmente en lo que hace al relieve. Es que allí, la Sierra del Aconquija se conecta directamente con el piedemonte y llanura tucumana, vale decir, con ausencia de las serranías bajas que sí se presentan más al norte y al sur de dicha zona. Esta zona pedemontana, denominada Bahía de Concepción, ha sido investigada por Korstanje (1991, 1992), que ha registrado sitios con cerámica de estilo Condorhuasi (Condorhuasi monócromo rojo y Condorhuasi polícromo) y litos esféricos pulidos con motivos felínicos pintados en dos colores. Además, en colecciones particulares se registraron esculturas en piedra tales como “suplicantes” (uno procedente de Monte Bello y otro de Piedra Grande, al oeste de Concepción) y cabezas antropomorfas, así como también hachas líticas ceremoniales, entre otros objetos (Korstanje 1991, 1992; Scatollin y Korstanje 1994). Sin embargo, con anterioridad a este trabajo, no se habían registrado evidencias arqueológicas en la parte baja del PNCLA. El principal objetivo de esta campaña fue detectar y registrar sitios arqueológicos en la zona, con el fin de aportar nuevos datos sobre la ocupación prehispánica en el área pedemontana tucumana y planificar tareas sistemáticas de investigación a realizarse en el corto y mediano plazo. La prospección arqueológica, entendida como el conjunto de estrategias (métodos y técnicas) tendientes a maximizar la detección de evidencias arqueológicas y a obtener un detallado relevamiento de las mismas (Gallardo y Cornejo 1985), se desarrolla en cada caso teniendo en cuenta las características naturales y antrópicas del área de estudio. En este sentido, las actividades de prospección en ambientes selváticos modificados por las actividades humanas (principalmente agrícolas), deben contemplar una serie de parámetros que a priori, podrían limitar o favorecer la detección de las evidencias arqueológicas como visibilidad de los espacios, obstrusividad de los restos arqueológicos (Mcmanamon 1984), accesibilidad de los lugares, unidades geomorfológicas, tipo de vegetación, presencia/ausencia de terrenos cultivados o arados, desmontes, rutas, caminos y sendas, etc. Ello permitirá al investigador orientarse con mayor facilidad en un área que se tradicionalmente se la ha considerado como complicada para el desarrollo de las investigaciones arqueológicas, por sus características ambientales y por los intensos procesos de formación de sitio que presenta (ver Miguez 2007). En primer lugar, consideramos que para este tipo de entornos conviene realizar una sectorización del área de estudio que de cuenta de los múltiples espacios que los constituyen, definidos por distintas variables naturales y antrópicas. Para ello, resulta ser de suma importancia el análisis de la cartografía existente para la zona, además del estudio de las fotografías aéreas para ir estimando, por ejemplo, la visibilidad y accesibilidad de los distintos sectores, así como el grado de impacto antrópico. La estrategia a seguir en la zona pedemontana de dicha área protegida consistió en desarrollar una metodología prospectiva que integrara un conjunto de tácticas pedestres que permitieran detectar y registrar en detalle las evidencias arqueológicas que pudieran estar presentes en la zona: 1)      En primer lugar se efectuó una transecta utilizando como eje principal el camino que une los puestos Santa Rosa y Los Chorizos (principal vía de tránsito en el parque), con incursiones o picadas a intervalos (a ambos lados del camino) regulares en la densa cobertura vegetal, en ocasiones aprovechando pequeños sectores despejados, sendas o la poco espesa selva secundaria. 2)      Además, se realizaron transectas paralelas o radiales y prospecciones de cobertura total en sectores despejados de vegetación o con vegetación secundaria de baja densidad. Una vez detectadas las evidencias arqueológicas se realizó el registro de las mismas mediante el relevamiento fotográfico, elaboración de croquis, mediciones de estructuras, registro de puntos con GPS, descripción de las características ambientales del entorno, estado de conservación de los restos, factores de alteración naturales y antrópico, etc. Los datos han sido registrados en fichas normalizadas de registro de sitios arqueológicos y en libretas de campo. Los sectores prospectados se hallan situados en las inmediaciones de los puestos Santa Rosa y Los Chorizos y lo largo del camino comunica a los mismos. En las inmediaciones del puesto Santa Rosa (900 m s.n.m.), se registró un mortero (de escasa profundidad) sobre roca metamórfica y una mano de molino confeccionada en granito. En el sector correspondiente al tramo del camino principal del parque, situado entre los puestos mencionados se detectaron estructuras consistentes en alineamientos de piedra circulares (de 1 a 3 mts de diámetro) y lineales, asociados a fragmentos cerámicos, restos líticos tallados (un núcleo y algunas lascas) y molinos de mano confeccionados en granito y gneis. También se observaron otros alineamientos de piedra, que no pudieron ser relevados debido a la alta densidad de la vegetación. En las inmediaciones del puesto Los Chorizos (1.100 m s.n.m.), se observo la presencia de otros alineamientos de rocas sobre el camino, junto con tiestos y lascas de cuarzo y andesita. También se registraron varios molinos de mano (realizados principalmente en rocas metamórficas) en sectores cercanos al mencionado puesto. Aunque las evidencias arqueológicas se distribuían de forma discontinua en el paisaje, consideramos que en conjunto representan la presencia de un solo sitio arqueológico, al que denominamos “Santa Rosa”. Las evidencias arqueológicas nos indican que el mismo presenta restos en buen estado de conservación, aunque se observaron alteraciones por procesos de erosión hídrica y arrastre de materiales culturales a lo largo del camino (el 70 % de los fragmentos cerámicos presentan bordes erodados). Estos procesos están siendo acelerados por el impacto antrópico generado por el paso de vehículos, pisoteo de animales de carga, tránsito personas, etc. por el mencionado camino. En total, se registraron 42 fragmentos cerámicos y 6 objetos líticos tallados. El análisis preliminar de los estos restos indica que los tiestos son de tamaños medianos a pequeños, mayormente de cocción oxidante y con finas a medianas inclusiones no plásticas. En general, todos los fragmentos cerámicos corresponden a distintas partes del cuerpo de vasijas, excepto por la presencia de un borde y un asa. Los restos líticos tallados corresponden a un núcleo prismático, dos FNRC y dos lascas. Las materias primas no han podido ser determinadas en detalle, pero corresponden a rocas igneas (probablemente adesitas), cuarcitas y cuarzo. El núcleo estaría confeccionado en una roca gabro-nerítica. Dada la escasa información que se tiene hasta el momento, no es posible efectuar conjeturas sobre el patrón de asentamiento o referirnos a cuestiones estilísticas o culturales de la evidencia registrada. Para aproximarnos a estas y otras cuestiones hacen falta nuevas prospecciones y excavaciones arqueológicas con el propósito de obtener un registro más completo de los sitios detectados y de la cultura material. Al respecto, se ha enviado un proyecto de investigación para la zona, el cual ha sido aprobado por la Administración de Parques Nacional y actualmente se halla en ejecución. Teniendo en cuenta que estas investigaciones se centran en el estudio de los paisajes arqueológicos prehispánicos, se considera que los hallazgos realizados son relevantes ya que las evidencias superficiales tales como restos de arquitectura, representan elementos de suma importancia ya que pueden constituirse en ejes de investigación a partir de los cuales el arqueólogo pueda aproximarse a la estructuración de las espacialidades dentro de los paisajes sociales prehispánicos (Miguez 2009). Además, este tipo de evidencias son escasas y difíciles de registrar en el piedemonte meridional tucumano, donde las actividades agrícolas han alterado la mayor parte de los sitios, evitando la conservación de las estructuras y de otro tipo de materiales arqueológicos (Miguez 2007). BIBLIOGRAFÍA GALLARDO, F. y L. CORNEJO. 1995. El diseño de la prospección arqueológica: un caso de estudio. Santiago de Chile. KORSTANJE, M. A. 1991. Estudio del Formativo Inferior en el Sud de la Provincia de Tucumán. Informe Final al Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET). Beca Pre-iniciación. Inédito. KORSTANJE, M. A. 1992. Avances en el conocimiento del Formativo en el piedemonte oriental del Aconquija (SO de Tucumán). Cuadernos 4: 175-181. S. S. de Jujuy. MCMANAMON, F. 1984. “Discovering Sites Unseen”. Advances in archaeological Method and Theory, Vol. 7: 223-292. MIGUEZ, G. 2007. Alerta! Más vale tarde que nunca. La gran destrucción del patrimonio arqueológico tucumano. Serie Monog. y Didáctica. Vol. 46. Fac. de Cs. Naturales e IML.-UNT. Tucumán. MIGUEZ, G. 2009. Paisajes arqueológicos y dinámica de ocupación prehispánica en el piedemonte meridional tucumano. Informe de avance de Tesis Doctoral (CONICET). Inédito.