ISES   20394
INSTITUTO SUPERIOR DE ESTUDIOS SOCIALES
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
La cerámica de Cueva de Cristóbal (El Aguilar, Puna de Jujuy, Argentina). Nuevas evidencias sobre producción y circulación de vasijas (3000-2500 AP) a partir del estudio de las pastas
Autor/es:
CREMONTE, MARÍA BEATRIZ; HOCSMAN, SALOMÓN; DÍAZ, ALBA; IGLESIAS, ARI; PICCON FIGUEROA, ROMINA ELIANA
Lugar:
Sucre
Reunión:
Congreso; Sexto Congreso de la Asociación de Estudios Bolivianos; 2011
Institución organizadora:
Asociación de Estudios Bolivianos, Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia y Museo Nacional de Etnografía y Folklore
Resumen:
En el marco del estudio de la transición de los grupos cazadores-recolectores a los agro-pastoriles en la puna argentina,  resulta relevante la comprensión de los procesos sociales que llevaron a la producción y/o adopción de nuevas tecnofacturas, como ha sido la alfarería. Desde esta perspectiva de análisis y como una contribución a la misma en esta ponencia se presentan los resultados obtenidos de la caracterización de las pastas cerámicas del sitio Cueva de Cristóbal.  Cueva de Cristóbal  es un abrigo rocoso localizado en la porción Oeste del Macizo de La Matadería, entre las Sierras de Aguilar y Alta, aproximadamente a 10 kilómetros de la  localidad El Aguilar y a 3.755 metros sobre el nivel del mar ( 23° 16´63,9” Lat.S y 65°36´63,7” Long.O). Se encuentra sobre un afloramiento de la Formación Pirgua (secuencia de conglomerados y areniscas de grano medio a finas rojizas). Este sitio, estudiado por Jorge Fernández  y caracterizado como un lugar donde se habrían realizado actividades restringidas y excepcionales de carácter ritual, ofrece valiosísima información sobre las primeras ocupaciones agropastoriles de la puna argentina y por ende de las cerámicas más tempranas del Noroeste de Argentina (Fernández 1988-89, García 1995). Recientes excavaciones llevadas a cabo en Cueva de Cristóbal  brindan nueva información indicando, por un lado, que el área ocupada fue significativamente mayor a la establecida originalmente. Por otro lado, la gran cantidad de artefactos formatizados tallados vinculados con actividades  de procesamiento/consumo, de restos faunísticos astillados y de fragmentos cerámicos con evidencias de uso, sustentan la hipótesis  de un contexto doméstico residencial. Las observaciones macroscópicas de las superficies cerámicas y a bajos aumentos de las pastas en lupa binocular permitieron identificar las series corrugadas, imbricadas, alisadas/alisadas y alisadas/ordinarias definidas por Fernández y seleccionar una muestra para análisis petrográficos de secciones delgadas en microscopio de polarización. El estudio cuali-cuantitativo realizado hasta el momento de las pastas correspondientes a 11 vasijas de las series mencionadas permitió identificar 5 tipos diferentes de pastas y 10 variedades (sobre la base de las asociaciones mineralógicas). Las pastas del Tipo 1 se caracterizan por presentar clastos graníticos, rocas presentes en la zona de Cueva Cristóbal, indicando en varios casos el agregado de diferente material antiplástico a sedimentos arcillosos similares. Las pastas del Tipo 2 son compactas y marrones en las que contrastan inclusiones muy grandes y redondeadas de cuarcitas (ampliamente distribuidas en la zona), aparentemente incluidas naturalmente en una arena con abundante cuarzo y plagioclasas. El Tipo 3 corresponde a pastas gruesas con abundantes cristaloclastos y litoclastos de lepometamorfitas y sedimentitas características de la Formación Puncoviscana predominante en la Quebrada de Humahuaca, distante a aproximadamente 50 kilómetros de Cueva de Cristóbal. Las pastas del Tipo 4 presentan una fase integrada por  limolitas areniscosas, abundantes clastos de cuarzo, plagioclasas y hornblenda; y otra fase integrada por areniscas muy finas similares a las sedimentitas alteradas  comunes en las pastas de tradición de manufactura Yavi-Chicha. Por último, las pastas del Tipo 5 presentan abundantes inclusiones grandes y angulosas de arcillitas marrones oscuras, aunque presentan variaciones en los porcentajes y tipos de los demás componentes petrográficos. La notable variación encontrada en las pastas cerámicas de Cueva de Cristóbal alerta sobre la complejidad de los procesos que generaron tanto la producción como la circulación de las alfarerías más tempranas en escenarios de transición arcaico-formativa, surgiendo la necesidad de establecer una base de datos comparativa con otros complejos trasandinos y del altiplano y valles meridionales de Bolivia.