ISES   20394
INSTITUTO SUPERIOR DE ESTUDIOS SOCIALES
Unidad Ejecutora - UE
capítulos de libros
Título:
La calidad de vida de la población del Noroeste Argentino
Autor/es:
BOLSI, ALFREDO; MADARIAGA, HORACIO; PAOLASSO, PABLO
Libro:
Geografía y bienestar. Situación local, regional y globl de la Argentina luego del censo de 2001
Editorial:
Eudeba
Referencias:
Lugar: Buenos Aires; Año: 2008; p. 263 - 297
Resumen:
Las seis provincias que integran el Noroeste Argentino (NOA) cubren más de 550.000 kilómetros cuadrados, es decir, el 20 por ciento de la superficie continental del país. Este amplísimo ámbito subtropical está conformado por dos grandes sectores: el occidental, donde la montaña es el hecho dominante, y el oriental -más extenso- ocupado en su mayor parte por la llanura. Los  efectos de la distancia a los océanos Pacífico y Atlántico, de las variaciones altitudinales, de la circulación general de la atmósfera, de la orientación de los encadenamientos montañosos, de los procesos tectónicos y geomorfológicos, etcétera, se hacen sentir en la riquísima y compleja red de paisajes naturales que caracterizan el área. Numerosas contribuciones científicas han dado cuenta de sus rasgos generales y de sus detalles, pero no se puede dejar de puntualizar que la naturaleza, en esta porción del país, no escatima los extremos: cuenta con cadenas montañosas ubicadas entre los más elevadas de las Américas; en pocas decenas de kilómetros pueden salvarse desniveles de 6.000 metros s.n.m., de más de 2.000 milímetros de lluvia y trasladarse desde las nieves permanentes hasta los tórridos ámbitos santiagueños; es atravesada por una riquísima red fluvial; su sector oriental está muy próximo al polo de calor sudamericano; contiene una amplia superficie boscosa, a la vez que registra la variedad vegetal más rica del país; posee, en fin, las amplitudes térmicas más pronunciadas de la Argentina. La variación es la norma. la calidad de vida del NOA en su conjunto mejoró entre 1991 y 2001. El índice regional de 1991 tenía un valor de 5,81 y en 2001 alcanzaba a 6,23. En ambos momentos, sin embargo, la región reunía, conjuntamente con el Nordeste, las peores condiciones en cuanto a calidad de vida de todo el país. En ese contexto de mejora pero a la vez de rezago interesa detectar, por un lado, los caracteres inherentes al cambio en si y por otro a los rasgos y procesos regionales y extrarregionales que definirían el escenario de esa doble condición del NOA. En tal caso, el primer interrogante se vincula con la identificación de diferencias en el interior de la región, con el propósito de agrupar sus departamentos según la magnitud de los cambios. El segundo se relaciona con el análisis de la incidencia de las variables que definen el ICV en los cambios detectados. El propósito final es el de reconocer áreas determinadas por la intensidad del cambio del ICV y por la forma de participación de las variables que incidieron en las modificaciones.