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La búsqueda de nuevos combustibles que provean energías alternativas ha llevado a analizar el uso del hidrógeno como combustible de vehículos particulares o de transporte. El proyecto de utilización de mezclas de Hidrógeno y GNC (Gas Natural Comprimido) como combustible va en dicho sentido. Sin embargo, el agregado de hidrógeno al GNC podría producir un eventual daño sobre las partes que constituyen el motor. Con el objetivo de estudiar el daño por hidrógeno, se ha implementado un sistema de hidrogenación de laboratorio para exponer materiales a tratamiento de recocido a alta temperatura bajo presiones moderadas de hidrógeno. Se estudiarán tanto las propias piezas que conforman un motor convencional (pistón, cilindro, aros, válvulas) como muestras de aleaciones simples. Para el análisis de los defectos inducidos por este tratamiento se utilizará la técnica de aniquilación de positrones (PALS) y medidas de resistividad. La técnica PALS ha sido ampliamente usada para la determinación de defectos a nivel atómico en sólidos, incluyendo vacancias y aglomerados de vacancias, dislocaciones y voids a escala nanométrica, como así también daño por hidrógeno en hierro y aceros. Los resultados obtenidos con estos tratamientos térmicos y de hidrogenación cuasi-estáticos serán comparados con aquellos obtenidos en un motor de combustión interna, de cuatro tiempos, modificado para exponer materiales al proceso de combustión cíclica del nuevo combustible.