Efecto del fungicida Iprodione sobre suelos cultivados bajo rotación maíz/soja y monocultivo de soja

MARÍA F. DOMINCHÍN; ROMINA A VERDENELLI; JOSÉ M. MERILES; FLORENCIA M. BARBERO; SILVINA VARGAS-GIL

Córdoba

Jornada; IV Jornadas ICTA y III Seminario del Cluster Industrial Agroalimentario de Córdoba; 2019

Instituto de Ciencia y Tecnología de los Alimentos. FCEFyN-UNC

Los microorganismos del suelo cumplen un rol fundamental en la optimización del ciclado de nutrientes y la descomposición de la materia orgánica (MO). Ciertas prácticas agrícolas, como la aplicación de fungicidas, sin los apropiados manejos, pueden producir alteraciones en la microflora y alterar el potencial productivo de los suelos afectando el rendimiento de los cultivos. El fungicida Iprodione, se aplica para el control de infestaciones por hongos en una gran variedad de cultivos. Sus efectos más importantes son interferir en la síntesis de DNA y de proteínas de la pared celular. Sin embargo, su efecto sobre organismos no-blanco, aún no ha sido completamente entendido. Con la finalidad de controlar los efectos adversos de los pesticidas sobre la calidad del ambiente es necesario conocer en detalle los factores y procesos que determinan el destino de los pesticidas en el suelo. El objetivo fue estudiar el efecto de la aplicación de diferentes dosis (dosis control 0DR, dosis recomendada 1DR y 10 veces la dosis recomendada 10DR) de Iprodione sobre la actividad y biomasa microbiana en suelos con dos tipos de manejo agrícola (rotación y monocultivo). El gradiente de deterioro se determinó por el contenido de MOS obteniéndose dos niveles asociados al manejo (L1: rotación cultivos con siembra directa y L2: monocultivo de soja con labranza convencional). Se estimó la biomasa de bacterias y total por medio de los perfiles de ácidos grasos fosfolípidicos (PLFA), la actividad microbiana se cuantificó a través de la hidrólisis de diacetato de fluoresceína (FDA) y la actividad deshidrogenasa (DHA). Nuestros suelos mostraron disminución significativa de actividad FDA y DHA entre suelos (L1>L2). En FDA, para L1 con dosis 1DR se incrementó la actividad en relación a ODR y 10DR. L2 no presentó diferencias entre dosis. En DHA, no se observaron diferencias entre dosis en L2 y se incrementó dicha actividad a 0DR en L1. Los perfiles de PLFA revelaron que el suelo L2 presentó mayor biomasa total y bacteriana que el suelo L1. En L1 y L2 se observaron los mayores valores de biomasa bacteriana con las dosis 1DR y 10DR, respectivamente. El efecto de la aplicación de Iprodione sobre organismos no-blanco resultó influenciado por el grado de deterioro edáfico como consecuencia del manejo. En suelos con menor contenido de materia orgánica se observó poca influencia de las dosis aplicadas de Iprodione en las actividades microbiana. Sin embargo, dicha la aplicación aumentó biomasa bacteriana y total posiblemente por la mejor adaptación de estas comunidades a condiciones desfavorables. En suelos con mayores contenidos de materia orgánica, la aplicación de Iprodione podría estar activando un mecanismo de detoxificación celular que se ve reflejado en un incremento de la actividad enzimática total y en la biomasa bacteriana principalmente con la aplicación de la dosis 1DR.