Fotografías etnográficas en espacios de arte. Notas a partir de las colecciones de Guido Boggiani y Grete Stern.

Universidad Nacional de Cuyo, Mendoza

Simposio; IV Congreso Interoceánico de Estudios Latinoamericanos, X Seminario argentino- chileno y IV Seminario Cono Sur de Ciencias Sociales, Humanid.y Relaciones Internacionales. Simposio Los archivos antropológicos de la Nación: escrituras, cuerpos, artefactos; 2010

Universidad Nacional de Cuyo

El trabajo pretende abrir una vía de discusión acerca de los problemas que enfrenta la fotografía etnográfica argentina en la cultura contemporánea, dada su inminente estetización. Paradojas y desafíos que desencadena su inclusión en ámbitos antes reservados a la práctica artística como museos, galerías y espacios alternativos de arte, y su consecuente tratamiento por parte del mercado del arte, las políticas curatoriales y el discurso crítico que reconocen su posibilidad artística y descuidan su articulación con procesos de alterización (construcción de identidades y diferencias culturales). Para ello analiza dos casos paradigmáticos de la fotografía etnográfica del Gran Chaco: la producción de Guido Boggiani realizada entre 1896-1901 en el Chaco paraguayo y la de Grete Stern obtenida entre 1958-1964 en el Chaco argentino. Ambas colecciones fueron y son exhibidas en museos de arte y centros culturales nacionales y extranjeros. Por otro lado, la utilización de estas imágenes como material de exhibición estética nos lleva a discutir el hecho de que hayan estado tradicionalmente en manos de un sector hegemónico determinando una suerte de “apropiación de una memoria visual ajena”. Y a observar en consecuencia, en qué medida pertenecen a los sujetos representados y/o sus descendientes problematizando el alcance de una “memoria visual” en comunidades de tipo tradicional, donde es la lengua (y no la imagen) el principal vehículo de identidad. La hipótesis que nos guía plantea que la fotografía etnográfica posee en la actualidad una carga política manifiesta que se efectiviza en el manejo que de ella realizan ciertos agentes implicados en su transacción, distribución, planificación, control y demanda. Son ellos los encargados de aprobar y reconocer las imágenes de la alteridad indígena como el “arte” de hoy, y de exaltar en nombre del mercado global capitalista, una pseudo-reivindicación de las identidades que promociona un “marketing de la diferencia”.