CEIL   02670
CENTRO DE ESTUDIOS E INVESTIGACIONES LABORALES
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Enfoques para pensar la relación entre diseño e inclusión social
Autor/es:
LUCIANO BORGOGLIO; CAMILA OFFENHENDEN
Lugar:
San Juan
Reunión:
Congreso; IV Jornadas Internacionales de Diseño para el Desarrollo Local; 2012
Institución organizadora:
Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Diseño - Universidad Nacional de San Juan
Resumen:
En los últimos años ha sido puesto en evidencia, por parte de numerosos autores y organismos locales e internacionales, el alto impacto del diseño en las economías actuales. Mediante datos de comercio exterior, valor agregado, facturación, empleo, entre otros, se ha contribuido a expresar el importante aporte de la disciplina más allá de su innegable valor sociocultural. Incluso se han puesto en evidencia aspectos económicos también significativos del aporte del diseño pero de aún más dificultosa medición, tales como su carácter de actividad de innovación: según la OCDE1 el diseño es el centro mismo de la innovación, en tanto constituye el momento en que un nuevo objeto es imaginado, diseñado y construido a modo de prototipo. El diseño es una de las principales vías para la incorporación de conocimiento en la actividad productiva y, por lo tanto, para la generación de mayor valor agregado en la producción local. En este sentido, el diseño puede pensarse menos como una disciplina en el borde de lo artístico, aplicada a un puñado de bienes característicos considerados “de diseño”, y más como un proceso aplicable, en mayor o menor medida, al conjunto de los bienes y servicios que ofrece una economía, mejorando su competitividad a través de la diferenciación e incluso la reducción de costos. Sin embargo, existe una profunda discusión ético-normativa que antecede a las cuestiones citadas y que atraviesa el siglo XX en el proceso mismo en que el diseño se constituye como disciplina. Esta discusión aborda la cuestión de cuál debería ser el rol social del diseño: la clase de imbricación de la profesión en el contexto social en que se desarrolla. En el marco de esta discusión, numerosos pensadores han alertado acerca de la autonomización operada sobre el campo del diseño y la cierta desconexión que parece tener, en ciertos momentos y lugares, de las restantes esferas de la sociedad. Como contrapartida, y con la transferencia de diseño como preocupación principal, existe ya un importante acervo de experiencias locales e internacionales que contribuyen a pensar el rol social del diseño en uno de sus aspectos más interesantes y menos abordados: el potencial para generar la inclusión y el empoderamiento de los grupos vulnerables. En la primera parte de este trabajo expondremos los principales aspectos del diseño en su carácter de industria creativa y como factor de competitividad en las economías contemporáneas. En la segunda y tercera parte nos proponemos conceptualizar el rol social del diseño en sus implicancias concretas sobre el bienestar de los sectores desfavorecidos, apoyándonos en los casos de la muestra estadounidense Design for the Other 90% y el de la experiencia local Manos del Delta respectivamente. Estos dos casos emblemáticos, como veremos, ilustrandos maneras diversas de concebir el diseño como disciplina proyectual y, en particular, el modo en que se orienta a los grupos vulnerables. Finalmente, expondremos algunas conclusiones e interrogantes abiertos por la problemática de la inclusión social a través del diseño.