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Las orugas de lepidópteros poseen cerdas especializadas como defensa contra los depredadores, las cuales en contacto con la piel humana pueden producir un accidente (erucismo). Ante las numerosas consultas recibidas en la Municipalidad de San Ignacio sobre hallazgos y accidentes por orugas, se decidió iniciar un estudio eco-epidemiológico para evaluar la diversidad y distribución de orugas así como también el impacto sanitario durante el año 2015.Se realizaron actividades de divulgación mediante charlas en escuelas, medios de difusión radial, Facebook y visitas domiciliarias. Se confeccionaron encuestas semi-estructuradas ad-hoc y láminas ilustrativas para recopilar la información en cuanto a la especie y cantidad de orugas, lugares/plantas de hallazgo, entre otros. Los datos obtenidos se analizaron con Epi-Info7®. Se colectaron las orugas y pupas en los domicilios donde se registraron casos de erucismo o hallazgos. El material biológico fue remitido al insectario del INMeT para completar los ciclos de crecimiento y obtener el adulto para su identificación taxonómica.Las 365 unidades domésticas (UD) que refirieron presencia registraron orugas urticantes. Se encontraron 2 especies de orugas en un 9,6% de las UD, hasta 3 especies en un 0,6% y se pudo colectar pupas en 7,3% de los hallazgos. Se pudo seguir en 5 especies el desarrollo desde larva a adulto. Predominó el hallazgo de megalopygidos (89,3%) con tres especies: Podalia orsilochus (79,8%), Podalia fuscescens (9%), Megalopyge undulata (0,7%), siguiéndole los satúrnidos (10,4%) con cuatro especies: Leucanella memusae (2,2%), Automeris sp. (5,6%), Pseudoautomeris sp. (1,9%), Dirphia muscosa (0,5%), y sólo se registró un hallazgo de Phoebetrium hipparchia (0,2%) perteneciente a la familia Limacodidae. Podalia orsilochus se encontró en 67 especies de plantas, mientras que P. fuscencens en 20 especies. En general, las orugas fueron encontradas en plantas exóticas (49%) y en menor medida en nativas (27%). De los 129 casos de erucismo, que representan un 35,4% de las UD, sólo el 2,3% fue registrado en turistas. La principal causante de accidentes fue P. orsilochus (83,7%), siguiéndole P. fuscencens (10,8%). El 82% de los vecinos encuestados manifiesta desconocer la procedencia de las orugas.En conclusión, este trabajo evidencia una amplia diversidad y distribución de orugas de importancia sanitaria en San Ignacio y sirve de base para conocer el impacto de los accidentes por orugas en el sistema de salud.

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