INVESTIGADORES
RUIZ MONACHESI mario Ricardo
congresos y reuniones científicas
Título:
Nuevos avances en el entendimiento de la comunicación química y visual en lagartos del género Liolaemus
Autor/es:
MARIO R. RUIZ MONACHESI; VALDECANTOS S.; LOBO F; CRUZ, FB; LABRA, A
Lugar:
San Miguel de Tucuman
Reunión:
Congreso; XV REUNIÓN NACIONAL y IV ENCUENTRO INTERNACIONAL ASOCIACIÓN ARGENTINA DE CIENCIAS DEL COMPORTAMIENTO; 2015
Institución organizadora:
ASOCIACIÓN ARGENTINA DE CIENCIAS DEL COMPORTAMIENTO
Resumen:
Introducción: Los organismos utilizan una o más vías sensoriales en forma paralela para comunicarse, existiendo evidencias de que duplican la información a través de los distintos canales. Sin embargo, también es posible que cuando existe redundancia de información, exista un compromiso (trade-off) entre el uso de una u otra modalidad. En lagartos del género Liolaemus se ha planteado la existencia de un trade-off en el uso de las vías químicas y visuales. Considerando la presencia de poros secretores de feromonas, como un indicador del grado de uso de comunicación química, y el número de despliegues visuales, indicador del uso del canal visual; es decir que a mayor número de poros, se realiza menor cantidad de despliegues visuales. En este trabajo indagamos en mayor profundidad esta propuesta, abordando dos Objetivos: 1. Probar experimentalmente si la carencia de poros precloacales implica ausencia de reconocimiento químico, 2. Evaluar a través de un estudio de métodos comparados filogenéticamente, si existe evidencias a nivel morfológico de solución de compromiso entre el uso de los modos sensoriales químico y visual. Método I)- se realizó un estudio comportamental en una especie en la que los machos, y las hembras, carecen de poros precloacales, L. coeruleus. Se grabó la conducta de los lagartos en terrarios con distintos rastros químicos: (1) propio, (2) conespecifico del mismo sexo, (3) heterospecifico del mismo sexo y (4) control, un terrario sin ningún rastro químico. Se registró la latencia del primer lamido, número de lengüetazos (como medida de exploración química) y tiempo de exploración; II)- morfo-funcional. En diez especies de Liolaemus con información de reconocimiento químico disponible de literatura, se realizó una comparación del número de poros precloacales, superficie del ojo, volumen de la cavidad nasal (estimador del órgano vómeronasal) y número de lamidos por minuto frente a sus propios rastros químicos (autoexploración) Resultados: 1- L. coeruleus realiza menor número de lamidos y exploración, a sus propios rastros químicos que en las otras condiciones experimentales, lo que denota un auto-reconocimiento. 2- La superficie del ojo y el volumen de la cavidad nasal correlacionaron positivamente entre sí y negativamente con el número de lamidos asociados al auto-reconocimiento. Por otra parte, el número de poros se correlaciono positivamente con el volumen de la cavidad nasal y la superficie del ojo y negativamente con el auto-reconocimiento. Discusión: 1. L. coeruleus presenta auto-reconocimiento evidenciado por la menor frecuencia de lamidos y exploración frente a sus propios rastros químicos. Esto sugiere que la ausencia de poros precloacales no indica carencia de reconocimiento químico. 2. Los análisis morfo-funcionales no mostraron evidencia de un compromiso entre el desarrollo de los órganos relacionados con la comunicación química y visual. Aquellas especies que exploran menos tienen mayor tamaño del ojo y mayor volumen de la cavidad nasal. El hecho de que el número de lamidos en auto-reconocimiento se relacionara negativamente con el número de poros precloacales, sugiere que los lagartos podrían requerir un cierto nivel de presencia de feromonas, y que una baja o nula producción de feromonas vía poros, se suple con una mayor exploración. El número de poros podría indicar no el nivel de uso de la modalidad química, sino el nivel de producción, que permitiría hacer más ?eficiente? el reconocimiento químico. Finalmente, aunque no existen evidencias de trade-off en los órganos implicados en el uso de la comunicación visual y química, quizás exista un trade-off entre las variables morfológicas y el auto-reconocimiento