INVESTIGADORES
FERNANDEZ Victor Ramiro
libros
Título:
Clusters y Desarrollo Regional en América Latina. Reconsideraciones teóricas y metodológicas a partir de la experiencia argentina.
Autor/es:
FERNÁNDEZ, V. R.; VIGIL, J.; VILLALBA, M; GÜEMES, MC; DAVIES, C.; DUNDAS, MV
Editorial:
Miño & Dávila
Referencias:
Lugar: Buenos Aires; Año: 2008 p. 360
ISSN:
978-84-92613-07-6
Resumen:
A esta altura es bien conocido que en los últimos 25 años se ha operado una profunda transformación en la visión del desarrollo territorial. Las raíces de esa transformación deben buscarse en el paradojal y concomitante movimiento de desterritorialización y reterritorialización que ha acompañado al ocaso de las políticas keynesianas del desarrollo y la emergencia del proceso de globalización (Keating, 2005). En el contexto de dicho proceso se han alterado las modalidades de coordinación y los esquemas de jerarquización de las acciones del desarrollo, y ello implica el desplazamiento de la hegemónica centralidad con la que contó el Estado nacional en los 20 años gloriosos de la posguerra para promover en forma bastante fusionada el desarrollo y la compensación regional (Keating, 2005), (Brenner, 2004). La reestructuración de las formas de producción y organización económico social que acompañó los procesos de globalización y la revolución tecnológica desde mediados de la década de los ?70 del pasado siglo, ha ido desbaratando el esquema de acción que campeó bajo el ciclo keynesiano, sustentado en Estados nación colocados como actores centrales en la promoción ?desde arriba? de procesos de desarrollo de regiones periféricas. Ello no sólo ha sido resultado de la emergencia de esquemas de reproducción que demandan flexibilidad y descentralización de las formas de coordinación económica e institucional (Piore; Sabel, 1984), (Lash; Urry, 1987), (Harvey, 1989), (Castells; Hall, 1994), sino también de la nueva y hasta entonces desconocida capacidad de los grandes actores capitalistas de mudar hacia otros escenarios ?más hospitalarios? (extranacionales) cuando las ?orientaciones?, estímulos o imposiciones a la inversión a nivel espacial desprendidas desde los Estados nacionales no les son favorables (Keating, 2005). En ese nuevo contexto, que ponía seriamente en cuestionamiento la tradición de políticas regionales concebidas centralizadamente desde los Estados nacionales, fue emergiendo hacia inicios de los ?80 la idea de un Nuevo Regionalismo (NR) (Murray, 1992), (Keating, 1998) (Lovering, 1999), (MacLeod, 2002). Impulsado primero en el campo académico, y luego en el de las políticas públicas y la formación institucional, ese NR encontró fundamento en un conjunto de cuerpos teóricos representados en conceptos como distritos industriales (DI), regiones inteligentes, medios innovadores, sistemas regionales de innovación (SRI), etc. Todos ellos han estado encaminados a destacar que, en el indicado escenario de reestructuración, las regiones, previamente opacadas por la avasallante presencia del Estado-nación, asumen una presencia estratégica (Ohmae, 1995), (Scott; Storper, 2003), (Cooke; Morgan, 1998). Sin embargo, fue a fines de los ?90 y a lo largo de 2000 cuando el concepto de cluster (CL) se consolidó no como el único, pero sí seguramente como el más representativo del NR, y asumió una hegemónica presencia por parte de los desarrollos teóricos y empíricos destinados a analizar el papel de los procesos de aglomeración y sus vinculaciones con el desarrollo y la competitividad. Esa presencia hegemónica ?acompañada de una visión bastante ideal sobre el rol de los CLs? ha ido conformando una línea inspiradora de políticas oficiales de desarrollo, no solamente en regiones y países centrales, como Europa y Estados Unidos, sino también, y a través de la activa implicación de organismos supranacionales como el Banco Mundial (BM), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Comisión Económica para América Latina de Naciones Unidas (CEPAL), en escenarios periféricos como el latinoamericano, donde hasta hace poco muchos de esos organismos se hallaban casi completamente volcados a perfeccionar los ?mecanismos de mercado? (BM, 1991; WB, 2000; BM, 2002). Ahora bien, no obstante la indudable utilidad de los enfoques en torno a los conceptos que acompañan a los CLs, los DI, las regiones inteligentes, los medios innovadores, los SRI, cuando se revisa detenidamente los esfuerzos de indagación realizados en la región latinoamericana, se aprecia con claridad que los mismos han sido presentados con perfil de replicación ?más que de readaptación o inspiración? de instrumentos analíticos y marcos teóricos originados en los países centrales. Dichos conceptos no sólo han estado destinados a analizar realidades claramente diferentes, sino que, además, para el examen de esas realidades se han mostrado portadores de ciertas debilidades e inconsistencias que figuran en las bases de sus formulaciones. En tal sentido, la introducción en América latina de esos instrumentos vinculados al desarrollo territorial ha sido escasa en evaluaciones referentes a las restricciones fijadas por las especificidades económicas, históricas e institucionales necesarias para la replicabilidad de los análisis, arrastrando con ello las propias debilidades ?que aquí denominaremos como ?fallas de origen?? de los marcos conceptuales elaborados en y para los países centrales. En este trabajo, entonces, lejos de negar la relevancia de producciones académicas e institucionales externas, muchas de las cuales constituyen importantes contribuciones a los enfoques del desarrollo, asumimos el desafío de contribuir a recuperar la capacidad de análisis crítico desde la región latinoamericana, perdida hace ya unas cuantas décadas. Para ello nos proponemos considerar primeramente las posibilidades efectivas de posicionar a los CLs como instrumentos estratégicos de desarrollo y competitividad, y, sobre esa base, volver a proponer lineamientos tendientes a configurar y cualificar una estrategia de desarrollo nacional, de carácter integral e integradora, en el marco de la cual las aglomeraciones productivas (APs) puedan superar sus restricciones analíticas y limitantes estructurales.