INVESTIGADORES
DJENDEREDJIAN Julio Cesar
congresos y reuniones científicas
Título:
Economía rural criolla y colonización en la década de 1860. Análisis de estructuras poblacionales y distribución de la riqueza rural en Esperanza, Santa Fe, y Paraná, Entre Ríos
Autor/es:
DJENDEREDJIAN, JULIO / MARTIREN, JUAN LUIS
Lugar:
Catamarca
Reunión:
Congreso; X Jornadas Argentinas de Estudios de Población; 2009
Institución organizadora:
Asociación Argentina de Estudios de Población
Resumen:
En el presente trabajo estudiamos dos núcleos geográficamente cercanos pero de formación y estructura socioeconómica disímil: la colonia agrícola de Esperanza, en Santa Fe, y el área rural de Paraná, Entre Ríos. Como es sabido, Esperanza fue la primera colonia agrícola fundada en Santa Fe en 1856, con población inmigrante de origen suizo. Constituye así un ejemplo muy pertinente de la nueva economía agraria que, sobre la base de implantar núcleos de población y producción nuevos, buscaba quebrar las pautas de eficiencia estática de la tradicional agricultura criolla mediante la introducción de formas de trabajo intensivas y la incorporación de mejoras técnicas y sobre todo de planificación racional que se suponía debían aportar los colonos europeos. La política de fundación de colonias, conformada por la intervención de empresas privadas y apoyo gubernamental, tuvo en sus inicios objetivos complejos y variados, que iban desde la obtención de lucro a través del aprovechamiento de la oferta inversa de factores en el viejo y el nuevo mundo, hasta los de modificar la estructura agraria local, promover el aumento de población, cambiar las prácticas agrícolas, aumentar el output por hectárea, generar nuevas fuentes de imposición fiscal e incluso propender a la defensa de fronteras. Esas iniciativas, que se pusieron en marcha desde 1850 con éxito al principio poco feliz en ambas provincias, constituyeron para Santa Fe un importantísimo factor de cambio productivo, evidente unas cuatro décadas más tarde con la existencia de más de 400 colonias. En tanto, el área rural de Paraná, ocupada por labradores al menos desde inicios del siglo XVIII y volcada al abasto urbano de esa ciudad y de la de Santa Fe, constituye un buen ejemplo de la tradicional economía agraria criolla, caracterizada por labranzas superficiales en áreas de cultivo muy limitadas y por un gran peso de la ganadería. Si bien el rendimiento agrícola de la misma parece haber sido bastante limitado, la orientación ganadera de las explotaciones muestra el peso de la demanda externa en el planeamiento e inversión, mientras que las colonias agrícolas de extranjeros estaban, en esta época, todavía orientadas a la provisión de bienes agrícolas diversificados a los mercados locales. Nuestro estudio buscará comparar, por un lado, las formas familiares existentes y el peso relativo de la oferta de mano de obra en ambas áreas. Partiendo del postulado de la importancia cardinal de la mano de obra familiar tanto para uno como para otro núcleo, se intenta detectar si realmente hubo diferencias entre uno y otro que justificaran o explicaran un mayor dinamismo de la economía del área de colonización con respecto a la criolla. Por otra parte, estudiaremos la distribución de la riqueza, a fin de mostrar hasta qué punto la formación de la colonia significó la creación de oportunidades nuevas y una homogeneidad mayor en la distribución de fortunas, que contrastaban con un relativo estancamiento y una alta heterogeneidad en la distribución de la riqueza en la economía agraria criolla de Paraná. De esa forma, y teniendo en cuenta que se trata, para Esperanza, de un momento inicial de su desarrollo, anterior al gran boom que llegará con la Guerra del Paraguay; y, para Paraná, de un período anterior a las dificultades de rentabilidad que experimentará con el desarrollo agrícola colonial en Santa Fe, que le quitará progresivamente los mercados urbanos de ambas ciudades, esperamos obtener un reflejo fiel de las condiciones relativas de ambas economías y de sus perspectivas. Gracias a la disponibilidad de fuentes de valor y detalle similar, podemos establecer una comparación sobre bases aceptables de esos rasgos fundamentales de ambos núcleos. Las fuentes principales para el estudio de las formas familiares son las fichas manuscritas del censo nacional de 1869 (conservadas en el Archivo General de la Nación, Buenos Aires), mientras que las correspondientes al estudio de distribución de riqueza son listas nominales de capitales declarados por los cabezas de unidad productiva para la imposición de la Contribución Directa (en el Archivo General de la Provincia de Santa Fe para Esperanza, y en el Archivo Histórico y Administrativo de Entre Ríos para Paraná). El nivel de detalle, los rubros valuados, el universo representado y las pautas de registro son similares para ambos casos. Por otro lado, también en ambos casos se incluyeron los propietarios exentos por no cubrir el mínimo no imponible determinado por las leyes, de modo que contamos con muestras bastante completas, que permiten ejercicios comparativos. Por lo demás, se utilizarán fuentes impresas y manuscritas para completar el análisis y ubicar el background económico y social de cada núcleo.