INVESTIGADORES
CAPMANY anahi
congresos y reuniones científicas
Título:
Chlamydia trachomatis recluta Myo1C para modular el entramado de actina que rodea la inclusión.
Autor/es:
CUERVO BUSTAMANTE ME; DIEGO DEL BALZO; SCHAUER K; DAMIANI MT; CAPMANY A
Lugar:
Mendoza
Reunión:
Congreso; Primer congreso provincial interuniversitario; 2021
Institución organizadora:
UNCuyo; UMAZA, UTN, UCA, UCH, UC, UM, UDA y UDA
Resumen:
Chlamydia trachomatis es una bacteria gram-negativa intracelular obligada y el agente bacteriano más frecuente de las infecciones de transmisión sexual. Esta bacteria modifica el citoesqueleto de actina para garantizar su entrada, desarrollo y salida de la célula. C. trachomatis se desarrolla en el interior de una vacuola modificada llamada inclusión, la cual se encuentra rodeada de actina. Chlamydia alterna entre dos formas, una infectiva no replicativa, llamada cuerpo elemental (EB) y otra replicativa no infectiva, llamada cuerpo reticular (RB). El ciclo comienza con la entrada de EB (forma infectiva) a la célula, quien pasa RB (forma replicativa), modifica la vacuola que lo contiene y se dirige hacia el centro de la célula donde comienza la replicación. El ciclo de desarrollo de Chlamydia es de 72h y una vez finalizado las bacterias salen por dos mecanismos posibles: I) lisis, que implica la rotura de la célula y su consiguiente muerte, o II) extrusión. Este último proceso involucra la invaginación de la membrana plasmática hacia el interior de la inclusión y la estrangulación de parte de la inclusión y la liberación de la misma al medio, sin ocasionar muerte celular. Las miosinas desempeñan un papel clave en la modulación del citoesqueleto de la actina. Sin embargo, la participación de las mismas en la infección clamidial ha sido poco estudiada. Nuestros resultados indican que Myo1C, una miosina de clase I que se encuentra principalmente en regiones dinámicas de la membrana plasmática, se recluta a la inclusión chlamydial de forma progresiva. Interesantemente, por microscopía confocal pudimos observar que la depleción de Myo1C causa la desestabilización del cinturón de actina que rodea la inclusión y disminuye el desarrollo de C. trachomatis. Paralelamente la inhibición de la formación de filamentos de actina por tratamiento con Latrunculin A, así como la sobreexpresión de GFP-Myo1C ΔABL (mutante de Myo1C incapaz de unirse a actina) alteran el posicionamiento de la inclusión. Además la sobreexpresión de GFP-Myo1C ΔABL, al igual que la depleción de Myo1C, afecta negativamente el desarrollo bacteriano. Interesantemente, pudimos observar por microscopía confocal tanto en preparados fijados como in-vivo, que a las 72 hs post-infección, en las células infectadas cuya salida bacteriana fue por extrusión, Myo1C se reclutó en los sitios de invaginación de la membrana y estrangulamiento de la inclusión con altas concentraciones de actina. Sobre la base de nuestros resultados, proponemos que MYO1C vincula la inclusión al cinturón de actina que rodea la inclusión, lo que podría ayudar a estabilizar el posicionamiento de la inclusión. Además, la interacción de MYO1C con el cinturón de actina y su papel en la estabilización de la actina podría ser clave en el proceso de extrusión.