INVESTIGADORES
COIRA beatriz lidia luisa
capítulos de libros
Título:
Magmatismo neógeno temprano de la Puna jujeña.
Autor/es:
CAFFE, P.J., COIRA, B., KAY, S.M.
Libro:
Geología y Recursos Naturales de la Provincia de Jujuy,
Editorial:
Asociación Geológica Argentina
Referencias:
Lugar: Buenos Aires; Año: 2008; p. 302 - 312
Resumen:
             El magmatismo que acompañó a la orogénesis andina en territorio jujeño se desarrolló durante el Neógeno, principalmente en el ámbito de Puna (Coira et al., 1993; Allmendinger et al., 1997), en una posición ubicada 100-200 km al este del arco frontal actual. El desarrollo del magmatismo guarda un estrecho vínculo temporal y geográfico con el alzamiento de la Puna-Altiplano, si bien la naturaleza de esa relación es aún objeto de debate (ver Oncken et al., 2007, para una síntesis). Ambos procesos parecen, sin embargo, estar íntimamente enlazados con los fenómenos tectónicos que resultan de la compleja interacción entre las placas de Nazca y sudamericana y con un grosor anómalo de la corteza en esta región (ver Kay et al., 1999; Kay et al., 2008).              El magmatismo que acompañó a la orogénesis andina en territorio jujeño se desarrolló durante el Neógeno, principalmente en el ámbito de Puna (Coira et al., 1993; Allmendinger et al., 1997), en una posición ubicada 100-200 km al este del arco frontal actual. El desarrollo del magmatismo guarda un estrecho vínculo temporal y geográfico con el alzamiento de la Puna-Altiplano, si bien la naturaleza de esa relación es aún objeto de debate (ver Oncken et al., 2007, para una síntesis). Ambos procesos parecen, sin embargo, estar íntimamente enlazados con los fenómenos tectónicos que resultan de la compleja interacción entre las placas de Nazca y sudamericana y con un grosor anómalo de la corteza en esta región (ver Kay et al., 1999; Kay et al., 2008). El magmatismo en Puna jujeña comenzó aproximadamente a fines del Oligoceno superior, desarrollándose según cuatro fases o ciclos (Coira et al., 1993) que acontecieron principalmente luego de que los pulsos tectónicos compresivos reconocidos en la región alcanzaran su máxima expresión (Allmendinger et al., 1997; Trumbull et al., 2007). Esta contribución es un resumen del conocimiento alcanzado en la última década acerca de los representantes de los dos ciclos volcánicos andinos más tempranos en Puna jujeña. Dichos ciclos acontecieron en el período que abarca desde fines del Oligoceno superior hasta principios del Mioceno tardío, etapa luego de la cual el volcanismo alcanzó su climax (ver Coira et al., 2008). Durante ese lapso de ~15 Ma de duración, la actividad magmática produjo una gran variedad de geoformas volcánicas y subvolcánicas, entre las que destacan campos de lavas intermedias y ácidas e intrusivos asociados, complejos volcánicos dómicos, estratovolcanes con distinto grado de preservación, e incluso posibles calderas de colapso escondidas bajo sedimentos más modernos.