CRITERIOS DE SELECCIÓN DE CEPAS PARA EL DISEÑO DE PRODUCTOS PROBIÓTICOS O VECTORES DE VACUNAS

MARIA CAROLINA MALDONADO GALDEANO

BUENOS AIRES

Conferencia; XVII CONGRESO LATINOAMERICANO DE MICROBIOLOGIA – X CONGRESO ARGENTINO DE MICROBIOLOGIA; 2004

En los últimos años existe una mayor preocupación e interés en la población por el consumo de alimentos que promuevan la salud. Esta inquietud motivó tanto a la ciencia como a la industria a sumar esfuerzos en la búsqueda de alimentos llamados funcionales. Estos últimos son productos potencialmente saludables, incluyendo alimentos modificados o ingredientes alimentarios que afectan una o varias funciones del organismo en forma específica y positiva, promoviendo un efecto fisiológico superior al de los nutrientes tradicionales. Entre éstos los más estudiados son los probióticos, los cuales son microorganismos vivos principalmente del género lactobacilos y bifidobacterias que potencian las propiedades de la flora intestinal y contribuyen a mejorar la salud por su acción protectora. Los probióticos han sido incorporados en alimentos lácteos, en productos a base de jugo de frutas o cereales y en productos farmacológicos. Uno de los mayores desafíos es la búsqueda de las cepas probióticas y de los criterios que se deben tener en cuenta en la selección de las mismas. Lo primero a tener en cuenta en la elección de una cepa probiótica es que el microorganismo sea considerado GRAS (Generally Recognized As Safe). Por otro lado debemos considerar la vía de entrada del microorganismo y las condiciones in vivo a las cuales va a ser sometido. Por definición los probióticos deben ser microorganismos viables, por lo que dependiendo del sitio de administración, los microorganismos deben ser resistentes a las enzimas presentes en la cavidad oral, a la acidez gástrica, a la concentración de sales biliares, a los jugos pancreáticos y a la presencia del mucus y la motilidad intestinal. Otro criterio a tener en cuenta es la adherencia de los mismos a las superficies mucosas y la habilidad de permanecer metabolitamente activos para poder ejercer los efectos beneficiosos esperados. La adhesión al epitelio es un mecanismo clave para que los probióticos puedan interactuar con el sistema inmune de mucosas. Diversos estudios han demostrado que los probióticos son capaces de estimular al sistema inmune de mucosas. Es importante conocer que tipo de inmunoestimulación producen, si es específica o no específica o si tiene alguna propiedad inmunmoduladora. Se ha sugerido además que los probióticos pueden ser usados como adyuvantes para aumentar la respuesta inmune contra otros antígenos administrados conjuntamente. Esto último llevó a plantear nuevas estrategias en el desarrollo de vacunas orales mediante el uso de probióticos como vehículos vivos de antígenos. Para ello son necesarios muchos más conocimientos para determinar que tipo de respuesta son capaces de promover las diferentes bacterias lácticas usadas como adyuvantes y el modo en el cual estas presentan al antígeno, ya que diversos estudios han demostrado que la respuesta inducida es diferente dependiendo de las cepa empleada.